ABC 06/11/13
· Las negociaciones están muy avanzadas con dos empresas para el voto electrónico fuera de Cataluña y para la compra de más de 2.000 urnas.
· Gasto millonario El Gobierno catalán dice que la consulta costará unos 15 millones de euros, aunque se reservaron 25.
La consulta soberanista ilegal que prepara el Gobierno de Artur Mas va tomando forma día a día. La Generalitat, que prevé gastar entre quince y veinticinco millones de euros, está negociando con varias empresas proveedoras de distintos productos y servicios necesarios para el referéndum secesionista.
Una de las piezas fundamentales será el voto electrónico para aquellos catalanes que residen en el resto de España o en el extranjero. Las leyes españolas no contemplan el mecanismo del voto por Internet, aunque sí podría ser implantado en un futuro más o menos próximo. Según ha sabido ABC, las conversaciones entre la Generalitat y la empresa que se perfila como la elegida están muy avanzadas, pese a que en su momento el contrato tendrá que salir a concurso público.
Pese a ello, todo apunta a que la logística del voto por Internet correrá a cargo de Scytl Secure Electronic Voting, una multinacional barcelonesa con amplia experiencia internacional.
La compañía, dirigida por el economista Pere Vallès, fue fundada en 2001 por un grupo de profesores de la Facultad de Informática de la Universidad Autónoma de Barcelona. Desde Scytl reconocen a ABC que la Generalitat es un «cliente potencial» y, por lo tanto, «no podemos dar información» sobre el estado de las negociaciones.
Artur Mas se ha comprometido con su socio de Gobierno, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), a que antes de que finalice el año se habrá fijado el día de la votación –que sería avanzado 2014–, así como la pregunta o preguntas sobre la independencia que pretenden plantear a los catalanes. Por ello, el gabinete del líder convergente está acelerando los temas logísticos, para que, llegada la fecha, todo esté preparado. La Generalitat opta por esta vía porque sabe que no puede contar ni con Correos ni con los consulados españoles en el exterior, al ser una consulta ilegal, además de rechazada por el Gobierno de Mariano Rajoy.
Scytl, que se define como «líder mundial en el voto electrónico», se encargaría de que cualquier catalán pueda votar desde su ordenador, una práctica en la que la seguridad es crítica para evitar fraudes electorales. La compañía barcelonesa ha participado en consultas electorales de varias países. No se trata de «referendos de autodeterminación», sino de distintos procesos electorales y consultas populares. Entre sus clientes están varios estados norteamericanos, como Florida, Virginia o Mississippi, y países como Francia, Noruega, Ecuador y los Emiratos Árabes Unidos, así como distintos cantones suizos.
Votación en Barcelona
En junio de 2010, Scytl, asociado a la multinacional Indra, organizó la votación que convocó el Ayuntamiento de Barcelona sobre los dos proyectos de reforma de la Avenida Diagonal. El sistema fue muy criticado entre los ciudadanos por los numerosos fallos electrónicos que se produjeron.
Según algunas informaciones, los catalanes no residentes dispondrán de siete días para el voto electrónico. Los dos últimos, sábado y domingo, coincidirían con la votación presencial en los colegios electorales. Para este capítulo la Generalitat necesitaría adquirir más de 2.000 urnas, porque las utilizadas en las distintas elecciones son propiedad del Estado. El Gobierno nacionalista ya ha pedido presupuestos y plazos de entrega a al menos un fabricante catalán, Espal World S.L., ubicado en Sant Boi del Llobregat. El coste de las urnas rondaría los 90.000 euros, a un mínimo de 40 euros por unidad.
ABC 06/11/13