La liga de derechos del hombre denuncia el ‘caso Jon Anza’

 

Para esta organización creada en Francia en 1898, ni la justicia, ni la policía galas funcionaron correctamente en el asunto del etarra Jon Anza. “Cuando algunos asuntos conciernen al País Vasco, Córcega u otros temas delicados de este tipo, parece que la justicia no llega a funcionar correctamente…”

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Militante de la ETA fallecido. La LDH* denuncia el mal funcionamiento de la justicia

La Liga de Derechos del Hombre (LDH) denunció el jueves el mal funcionamiento de la justicia en la investigación sobre la desaparición, hace ya más de un año, del militante de ETA Jon Anza cuyo cadáver fue encontrado e identificado en Toulouse el pasado mes de marzo.

“Estamos ante una impresionante serie de elementos que permiten asegurar que ni los servicios de policía, ni los servicios judiciales han funcionado correctamente” declaró Jean – Pierre Dubois, presidente de la LDH, durante una conferencia de prensa.

“Cuando algunos asuntos conciernen al País Vasco, Córcega u otros temas delicados de este tipo, parece que la justicia no llega a funcionar correctamente”, manifestó.

Jon Anza desapareció el 18 de abril de 2009 cuando iba de Bayona a Toulouse en tren “para entregar dinero” a la organización separatista, según las indicaciones facilitadas por la ETA.

Fue recogido sin conocimiento diez días más tarde en Toulouse, en un plaza pública, antes de fallecer en el hospital el 11 de mayo de 2009, pero su cuerpo no fue identificado hasta el pasado 11 de marzo en la morgue de un hospital de Toulouse.

Según la LDH, cuando se supo que Jon Anza iba a acudir a Toulouse, no se realizó ninguna investigación en Toulouse y no se preguntó en ningún hospital tolosano.

El jueves, los abogados de la familia criticaron duramente una “investigación totalmente insuficiente” e indicaron haber enviado una carta a la ministra de Justicia, Michèle Alliot-Marie, para solicitar la intervención de la Inspección General de los servicios judiciales.

El comité Jon Anza, constituido para aclarar su desaparición y su muerte, teme que el militante fuera secuestrado por agentes españoles que le habrían interrogado y torturado antes de abandonarle en la vía pública.

“Actualmente, el funcionamiento de los servicios de policía y de justicia permiten todas las suposiciones” añadió el señor Dubois.

* LDH: Ligue des Droits de l’Homme: Liga de Derechos del Hombre

La Dépêche (Toulouse, Francia), 1/7/2010