IÑAKI EZKERRA-EL CORREO

  • Hay algo peor que no haber leído nada: tener una culturilla de Wikipedia

Yolanda Díaz quiere que abandonemos la carga pesada del concepto ‘patria’ para trabajar sobre el concepto ‘matria’, una brillante iniciativa que no debe sorprendernos en una ministra de Trabajo hondamente preocupada por los cuatro millones de parados de la España de la crisis sanitaria. Pero, más allá del innegable calado laboral de la propuesta y del idóneo contexto elegido para formularla (la Semana Negra de Gijón), a mí me parece que estamos ante un cebo que le ha querido poner a la derecha española para que, cuando ésta la descalificara entendiéndola como una extravagancia más de la ultracorrección política e inclusiva (como la de las niñas, niños y niñes), poder esgrimir el rancio y literario abolengo de la palabreja y espetarle que no se la inventó Irene Montero, sino que la han usado escritores como Borges o Unamuno.

Hay algo peor que no haber leído nada: haber leído un poco y tener una culturilla de Wikipedia con la que se cree que se puede epatar al personal. Que un término haya sido acuñado o utilizado por uno o varios escritores no quiere decir que tenga que imponerse necesariamente en el habla oficial. Walter Scott se inventó la expresión ‘freelance’ para los mercenarios de su novela ‘Ivanhoe’ y el vocablo cuajó socialmente incluso fuera del ámbito británico para los trabajadores autónomos. Otros inventillos léxicos no corrieron la misma suerte. Cuando los franceses protestaron por el uso español de la palabra ‘coñac’ para denominar al brandy de Jerez, al poeta Pemán se le ocurrió un ortopédico palabro -‘jeriñac’- que resultó un estrepitoso fracaso. Algo parecido puede pasarle a la matria en la que Yolanda Díaz desea que trabajemos. La idea la soltó en Gijón y el personal guardó un silencio a todas luces hipócrita porque nadie tuvo allí cataplines para ponerse a cantar el ‘Asturias, matria querida’. Tampoco le auguro un gran éxito a ese cambio de sexo lingüístico-ministerial en el Día de la Patria que monta anualmente el PNV. No le veo a Urkullu cambiando el Aberri Eguna sabiniano por una matria vasca unamuniana.

Por otra parte, si somos fieles a la doctrina de la corrección política, repararemos en que la palabra ‘patria’ es inclusiva y sexualmente más abierta que la matria: su raíz latina es la misma que la del masculino ‘pater’, de acuerdo, pero a la vez se cambia de acera sexual en el sufijo, como si fuera una hembra atrapada en un cuerpo de hombre contra el que se rebela. Y, así, mientras la madre matria es una redundancia (pesada, que diría Yolanda), la madre patria suena a cambio de género, a ligera, a bisexual, a ‘queer’. Yo creo que la madre patria es el verdadero concepto trans. Sobre esto debería pronunciarse el LGTB.