La ‘senyera-trozo de tela’ de Punset fuerza la crisis en la dirección de Ciudadanos

EL CONFIDENCIAL 18/10/16

· La europarlamentaria abandona su cargo orgánico tras varias polémicas con la bandera y lengua valencianas. El partido no esconde que sus posturas chocaban frontalmente con los afiliados

Carolina Punset dimitió este lunes como miembro de la ejecutiva de Ciudadanos tras comunicárselo personalmente a Albert Rivera y para sorpresa de muchos de sus compañeros en el comité ejecutivo nacional, que no esperaban una determinación tan repentina. Lo hizo sin generar ni un poco de ruido. Según confirman fuentes de la cúpula naranja, no transmitió su decisión durante la reunión de la dirección, evitando interferir en la rueda de prensa posterior del líder del partido, con el que mantiene además una buena relación de amistad personal. Al término de la intervención pública de Rivera, la eurodiputada habló con su jefe de filas a solas, justo antes de marcharse al aeropuerto de Barajas. Sin embargo, varias polémicas protagonizadas por la exportavoz de Ciudadanos en la Comunidad Valenciana, por sus posturas sobre la lengua y los símbolos propios de la región, se sitúan en el origen de esta renuncia.

La controversia más reciente tuvo lugar el pasado 9 de octubre durante la festividad autonómica valenciana, en la que Punset se refirió a la ‘senyera’ en un tuit como “trozo de tela” en el mismo momento en que su compañero de filas, Fernando Giner, portaba la bandera oficial de la Comunidad Valenciana gracias a la iniciativa del alcalde, Joan Ribó, y que fue muy bien acogida por el actual portavoz de Ciudadanos. Giner asumió la portavocía el pasado febrero, cuando Punset fue nombrada europarlamentaria y se marchó a Bruselas.

Anteriormente, la dirigente valenciana ya fue objeto de alguna otra sonada polémica, como cuando en el debate de investidura —aún como portavoz de C’s— hizo una durísima crítica a la inmersión lingüística, asegurando que “donde triunfa es como volver a la aldea” y señalando que el valenciano “puede ser entrañable, pero poco útil para encontrar empleo”. Un discurso que no gustó a gran parte de la militancia valenciana de la formación de centro, que tampoco acepta otras posturas de la excandidata a la Generalitat. De hecho, según ha podido saber este diario, las críticas de los afiliados valencianos sobre las posiciones públicas adoptadas por Punset llegaron a la Secretaría de Organización en las últimas semanas, especialmente el comentario sobre la festividad del 9 de octubre, que además chocó frontalmente con su compañero valenciano en la ejecutiva.

El propio partido desautorizó de inmediato las palabras de la eurodiputada en un comunicado que decía: “En Ciudadanos nos sentimos orgullosos de todas las banderas autonómicas, que nos representan al igual que la española y la europea”. El secretario general de la formación, Matías Alonso, tampoco escondió la posición del partido tras la dimisión de Punset este lunes, al afirmar estar agradecidos con su trabajo, “aunque somos conscientes de que en la Comunidad Valenciana ha defendido, en ocasiones, posturas que han chocado con el sentir mayoritario de los afiliados respecto a la utilización de los símbolos constitucionales y las lenguas cooficiales”. Una justificación sin paños calientes del sentir de la cúpula naranja.

Oficialmente, ninguna otra voz se pronunció dentro del partido tras la noticia, y las indicaciones del área de comunicación que dirige Fernando de Páramo pasan por la absoluta discreción, al menos de momento. Fuentes internas del partido, eso sí, confirman que en más de una ocasión Punset trató de recabar apoyos dentro de la ejecutiva para proponer cambios de postura en decisiones estratégicas con las que discrepaba abiertamente, sin obtener éxito alguno. Ella misma reconoció como “estéril” su labor dentro del comité ejecutivo por el mismo motivo.

Más «discrepancias»: política de pactos
Más allá de su posición sobre la necesidad de “desarticular” cualquier tipo de nacionalismo, “incluyendo el regionalismo no independentista”, la estrategia seguida por la dirección del partido en la política de pactos durante los últimos meses tampoco ha sido apoyada por Punset. Aunque miembros de la ejecutiva aseguran que su última posición sobre la investidura de Rajoy fue acordada “por unanimidad”, la eurodiputada ha sido una de las dirigentes que más claramente han desaprobado los ‘vaivenes’ del partido.

Punset aseguró en su comunicado no compartir “la mayor parte de las decisiones estratégicas” tomadas por el comité ejecutivo, en las que los pactos nacionales han tenido un gran peso. Su firme ideario ecologista sitúa a la eurodiputada en el lado más socialdemócrata del partido, postura que nunca ha escondido y que la llevó a diferir en los últimos pasos dados por la dirección sobre la investidura del candidato del PP, como a otros miembros de la ejecutiva, que no vieron acertada la decisión de apoyar a Rajoy tras fracasar el pacto con Pedro Sánchez. Sobre todo porque la excandidata a la Generalitat, según fuentes del entorno, apostaba por desvincular al partido de centro como soporte del PP, así como ver en sus votantes desencantados un caladero de apoyos. 

En ese sentido, la dirigente apeló al origen existencial de la formación, al terminar su comunicado insistiendo en que sigue pensando que en España «hace falta un partido reformista, transversal, que combata lo que entiendo que son las dos grandes lacras de la política española, el sectarismo de izquierdas y derechas y el nacionalismo».