La red ciudadana por el acuerdo y la consulta, Lokarri reclamó ayer al Gobierno que «facilite y colabore» en las labores de verificación del alto el fuego de ETA, afirmó que la legalización de Sortu «facilitaría iniciar un proceso de paz transparente y abierto» y consideró que no se deberían «perseguir» opciones «legítimas y legales, como Bildu».
Además, dijo que la decisión de la Audiencia Nacional de revocar la libertad del preso de ETA Antton Troitiño «añade más obstáculos a este momento de oportunidades».
El portavoz de Lokarri, Paul Ríos, y la también miembro de la red ciudadana Aitziber Blanco presentaron en Bilbao los contenidos del informe del Observatorio Social del proceso de paz, correspondiente al invierno de 2011.
En cuanto a la presencia de facilitadores internacionales, Lokarri la calificó como una forma de «garantizar la veracidad del alto el fuego». En este sentido, Ríos recordó la intención del Grupo Internacional de Contacto de comenzar por «el tema de la extorsión y el impuesto revolucionario» para comprobar si ha cesado.
Lokarri recomendó que los partidos políticos y medios de comunicación «no descalifiquen ni obstaculicen» su labor. Así, emplazó al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a que «facilite y colabore en las labores de verificación con todos sus recursos de forma discreta o pública, y que inicie las vías de comunicación que considere oportunas».
«Logros y errores»
La declaración de Lokarri se produjo el mismo día en que ‘Gara’ publicaba un nuevo capítulo del último ‘Zutabe’ de ETA, en el que repasa sus 50 años de actividad y se plantea colaborar para «abrir puertas a la libertad». La organización terrorista destaca «avances y logros» a lo largo de su medio siglo de existencia, pero también «contradicciones y errores». «Los pasos dados en estos meses no se pueden entender sin el reconocimiento de estos más de 50 años», dice ETA, que habla del «inicio de otra era».
EL CORREO, 21/4/2011