EL MUNDO – 01/07/15
· El Govern detalla en un informe una supuesta «ofensiva» del Estado contra la comunidad.
A dos meses de las elecciones catalanas, el Gobierno de Artur Mas ha recopilado en un memorial lo que considera que son todos los agravios del Estado contra Cataluña de los últimos años, bajo un título que no da pie a la confusión. Crónica de una ofensiva premeditada se llama un documento que denuncia la supuesta «estrategia del Ejecutivo español para ahogar, limitar y laminar» el autogobierno catalán.
El documento, de 102 páginas y elaborado por personal interno de la Generalitat por expreso encargo del Departamento de Presidencia, afirma que existe una visión «monolítica» del Estado, al que acusa de falta de diálogo y de «inacción» ante las propuestas de Cataluña de pacto fiscal y ante la posterior consulta de autodeterminación.
Además, también da por hecho que existe un «ataque» del Gobierno español al modelo educativo catalán, un «menosprecio por la lengua» y una «pasividad» del Estado ante algunas «posturas catalanófobas». Motivos que han provocado que muchos catalanes «quieran ahora el derecho a decidir», en palabras de la nueva vicepresidenta del Govern, Neus Munté.
En su intento de buscar complicidades que secunden su hoja de ruta soberanista, el informe «formará parte del material» que difundirán los órganos de representación de la Generalitat en el exterior, como las embajadas. El Ejecutivo catalán también ha previsto que el presidente Artur Mas aborde su contenido en el viaje que realizará a Bruselas mañana mismo.
El grueso del informe está dedicado a recopilar los supuestos agravios y las presuntas desigualdades económicas que ha sufrido Cataluña en los últimos 10 años. En concreto, el Govern cifra en 15.000 millones de euros el déficit fiscal catalán, a los que suma los 3.967 millones de la disposición adicional tercera del Estatut. Es decir, las inversiones en infraestructuras que el Ejecutivo central debería devolver a Cataluña desde 2008.
La Crónica de una ofensiva premeditada de la Generalitat se remonta a las negociaciones del tripartitocon el Gobierno de Zapatero por el Estatut, para acabar con el documento con 23 peticiones que Mas presentó a Rajoy el verano pasado y del que «no ha obtenido ningún resultado relevante». En este sentido, también destaca que desde 2011 «el Estado español ha paralizado las relaciones bilaterales Estado-Generalitat».
Siguiendo esta línea, el documento denuncia que el Ejecutivo del PP ha reducido un 71% la inversión en Cataluña entre 2009 y 2014 y ha recortado en 240 millones una medida tan sensible como la Ley de Dependencia. «Hubieran permitido crear 13.000 nuevas plazas residenciales o incluir a 26.500 personas en el sistema de protección», apostilla. De hecho, la vicepresidenta ya advirtió ayer de que el informe pone «ejemplos muy concretos para hacer pedagogía» y diagnosticar «qué es lo que impide profundizar en el bienestar de las personas».
Pese a repasar la trayectoria y las relaciones con Cataluña durante la última década, el Govern apunta directamente al Ejecutivo de Rajoy, al que culpa de haber frenado los impuestos que ha querido promover la Generalitat. O lo que es lo mismo: el euro por receta, las tasas judiciales y la cuota por depósitos bancarios. También compila los 19 recursos al Tribunal Constitucional (TC) contra normativas, como el decreto de pobreza energética o el modelo catalán de comercio.
Capítulo aparte merece el «ataque al modelo lingüístico catalán», que se suma a esa presunta «pasividad» del Ejecutivo central ante las reiteradas muestras de catalanofobia. Entre otras cuestiones, el Gobierno de Artur Mas recuerda los intentos de acabar con el modelo de inmersión lingüística en catalán a través de la Ley de Educación, con el pago de la escolarización a aquellas familias que reclamen una enseñanza bilingüe para sus hijos.
También critica que «los catalanes que han querido gestionar documentación en lengua catalana en consulados españoles no han podido» o que la presencia del catalán «es nula» en los medios de comunicación privados de ámbito estatal. También denuncia supuestas «presiones diplomáticas para evitar la participación de las selecciones catalanas en competiciones internacionales» y pide el retorno completo de los papeles de Salamanca.
LISTA INTERMINABLE
Déficit fiscal. Cifra 15.000 millones de euros el déficit fiscal catalán, a los que suma los 3.967 millones de la disposición adicional tercera del Estatut. «Cataluña es la tercera comunidad que más paga y la décima en recibir».
Lengua. «Los catalanes que han querido gestionar documentación en lengua catalana en consulados españoles no han podido», detalla el informe. También denuncia que «la presencia del catalán en los medios de comunicación estatales es escasa o nula».
Recaudación. El Govern reclama «el 50% de la recaudación del gravamen especial sobre premios y loterías» y 50 millones como compensación «por la asistencia sanitaria a desplazados de otras comunidades».
Políticas sociales. Se critica el pago de la escolarización en castellano. También un recorte de 240 millones en la Ley de Dependencia y la falta de recursos en proyectos de apoyo a la familia.
Cultura. «Se ha eliminado el fondo estatal de promoción de las películas en catalán» y se han reducido las inversiones en museos, «mientras los presupuestos del Prado, Reina Sofía, Thyssen y Teatro Real aumentan». Se pide el retorno de la totalidad de los papeles de Salamanca.