Los obispos del País Vasco han instado a la iglesia católica de Roma para que se disculpe por su silencio en los asesinatos de curas realizados por las fuerzas derechistas del general Francisco Franco durante la Guerra Civil española.
Por Fiona Govan, Madrid
La iglesia católica española apoyó el alzamiento de Franco contra el electo Gobierno republicano de izquierdas. Mientras que la Iglesia siempre ha honrado a los cientos de sacerdotes que murieron a manos de los republicanos, aquellos que fueron asesinados por Franco han sido oficialmente ignorados.
En un gesto sin precedentes, se celebró una misa en la catedral de la capital de País Vasco, Vitoria, para recordar a los 14 curas que fueron asesinados por las fuerzas de Franco durante la guerra de 1936-39.
“El silencio con el que los medios oficiales de nuestra iglesia envolvieron las muertes de esos sacerdotes no es ni justificable, ni aceptable por más tiempo” dijo el obispo de Vitoria, Mikel Asurmendi, durante la ceremonia.
“Este largo silencio ha sido no sólo una omisión indebida sino también una falta a la verdad y un acto contra la justicia y la caridad”.
La iglesia católica ha beatificado a cientos de “mártires” que fueron asesinados por los republicanos, quienes fueron claramente anticlericales. El Papa Benedicto XVI organizó en octubre de 2007 la mayor ceremonia de beatificación cuando rindió honores a casi 500 sacerdotes, monjes y monjas españoles que murieron de esta manera.
Existen planes para celebrar otra ceremonia similar y que, además, estaría motivada por las críticas de los españoles que consideran que la Iglesia debería resarcir su apoyo al régimen de Franco, que se prolongó hasta la muerte del general en 1975.
España ha logrado acuerdos con los que superar el trauma de su historia reciente. Hace dos años, el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero aprobó la Ley de la Memoria Histórica que reconoce a las víctimas de Franco.
TELEGRAPH (Reino Unido), 12/7/2009