ABC – 29/05/15
· Voluntarios de las organizaciones promotoras los distribuirán 90 minutos antes del partido.
· «A sangre y fuego» El texto suscrito por las entidades organizadoras plantean el acto como una protesta contra quienes «entraron a sangre y fuego en Cataluña en 1939».
Los organizadores de la pitada contra el himno nacional repartirán un total de 15.000 silbatos antes del comienzo de la final de la Copa del Rey que se celebrará mañana sábado. Según ha podido saber ABC, las plataformas secesionistas que impulsan esta iniciativa se han dividido esa labor de reparto de los pitos, así que hora y media antes que comience en encuentro entre el F.C. Barcelona y el Athletic Club de Bilbao se colocarán ante el acceso al estadio del Nou Camp que hay en la calle Arístides Maillol.
La asociación Catalunya Acció repartirá 10.000 silbatos, mientras que el resto de entidades que secundan el escarnio contra el Rey distribuirán un total de 5.000. De este segundo contingente de pitos se harán cargo el sindicato catalanista CADCI, Sobirania i Progrès, International Comission of European Citizens (ICEC), Fundació President Macià; Ara o Mai!, Catalunya diu Prou, Casal per la Llibertat ila Independència de Catalunya (CLIC), Societar Catalana de Lliure Opinió (SOCALL), Moviment de Cultura Popular «El Socrat» y Units per Declarar la Independència de Catalunya (UPDIC).
Todos ellos han suscrito el «Manifiesto por la pitada al himno español y a Felipe de Borbón», en el que instan a enfocar esta protesta como una expresión de que «queremos dejar de ser súbditos del Reino de España para convertirnos únicamente en ciudadanos de una Cataluña independiente» y recuerdan a quienes «entraron a sangre y fuego en Cataluña en 1939».
Explican los autores del texto que «Cataluña vive una situación política decisiva. Los catalanes, mayoritariamente, hemos entendido que, o nos independizamos de España, o desaparecemos como pueblo». Consideran que «llegar a la victoria final, que no es otra cosa que la proclamación del estado catalán independiente con el consiguiente control político efectivo del territorio, requerirá de una gran firmeza en todas nuestras acciones y no perder ninguna oportunidad para expresar nuestra voluntad de libertad nacional».
«Esta lucha –añaden– se dirime en cualquier frente: político, cultural, social o lingüístico», pero también «en el de la protesta cívica colectiva. Y el 30 de junio «se nos vuelve a presentar una excelente oportunidad para demostrar una vez más que queremos dejar de ser súbditos del Reino de España para convertirnos únicamente en ciudadanos de una Cataluña independiente». Proponen que cuando el Rey «haga su aparición en el palco del estadio mientras suenan los acordes de la Marcha Real» los asistentes al partido en el estadio «y los que no también», manifiesten «sonoramente su desacuerdo, tanto por la presencia del monarca como por la interpretación del himno español, que seguramente acompañarán también los seguidores vascos».
«Complejo de esclavo»
«Posiblemente algunas voces de la política oficial catalana volverán a repetir que es necesario tener respeto por los símbolos de ese estado que nos quiere humillar y negar nuestros derechos nacionales. Un estado que haría de la lengua catalana una reliquia del pasado a través de sentencias judiciales, que permite que se equipare impunemente al independentismo catalán con el fascismo o que continua protegiendo y exaltando la memoria de aquellos que entraron a sangre y fuego en Cataluña en 1939 y nos fusilaron un presidente. Pedir respeto para quien te trata como a un trapo sucio sólo puede explicarse desde un profundo complejo de esclavo».
Entre las entidades organizadoras está Sobirania i Progrès, confundada por el presidente de ERC, Oriol Junqueras, y que cuenta entre sus filas a dirigentes de Convergència y de la formación republicana.
ABC – 29/05/15