Mas impulsa un frente común para reavivar el soberanismo

EL MUNDO – 21/06/15

· Admite que el independentismo catalán va a la baja y se ofrece para liderar las «plebiscitarias» «El camino de los del ‘Sí se puede’ lleva a una autonomía ahogada y reprimida» Unió confirma la ruptura e irá en solitario el 27-S.

La ilusión por el proceso soberanista debe regresar a la sociedad catalana para que las fuerzas nacionalistas obtengan el 27-S la mayoría necesaria y emprendan el camino hacia la independencia de Cataluña. Un anhelo que se ha truncado, considera el presidente de la Generalitat, Artur Mas, que llama a la sociedad civil a «poner el turbo» para afrontar con «la máxima ilusión posible» las elecciones «plebiscitarias», «porque si no se corre el riesgo de que con el proyecto soberanista no se gane».

Tras admitir que «el turbo de la ilusión del proceso» que movilizó a los catalanes en 2012 «ha descendido», ha perdido fuelle, el líder convergente alertó: «tenemos muchos adversarios, y poderosos, que harán lo posible para que el movimiento soberanista pierda fuerza».

«Las elecciones municipales han dibujado un nuevo eje en la política catalana que pone el acento en la lucha de clases, pero no en el proceso soberanista. No nos equivoquemos. No lo olvidéis», advirtió Mas ante más de medio millar de personas que acudieron al inicio de la campaña Benvinguts al futur! [¡Bienvenidos al futuro!], que impulsa Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) para el 27-S y de la que el acto de ayer fue el punto de partida.

«El Sí se puede de la plaza Sant Jaume [ubicación del Ayuntamiento de Barcelona] tiene muy poco que ver con la libertad y el autogobierno de Cataluña, con la soberanía y el referéndum para el futuro del país y su camino lleva a una autonomía ahogada y reprimida», apostilló el presidente al poner de manifiesto que las fuerzas emergentes «se centran en la lucha de clases pero no en el derecho a decidir». De ahí que pidiera al mundo soberanista que encuentre la manera de hacerles frente «en esta recta final».

Arropado por su esposa, Helena Rakosnik, y por los también líderes convergentes Josep Rull y Lluís Corominas, el presidente de CDC hizo un llamamiento a las entidades soberanistas que firmaron la hoja de ruta para la independencia para que contribuyan a «hacer realidad desde la sociedad civil organizada la unidad que necesita Cataluña, porque es un momento decisivo que no podemos perder» y porque, además, «quien sí se está agrupando es el mundo del Sí se puede».

En esta nueva alusión velada a fuerzas como Podemos en el conjunto de España o Barcelona en Comú en el Consistorio barcelonés, Mas evidenció que estos movimientos son muy similares y que con su victoria lo que se conseguirá es «repartirse una autonomía recortada, ahogada, mutilada… por muy buena que sea su voluntad».

La Asamblea Nacional Catalana (ANC), Òmnium Cultural, la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) y el grueso de instituciones y entidades que configuran el Pacto Nacional por el Derecho a Decidir son, pues, las llamadas por Mas para encabezar sus aspiraciones nacionalistas «porque está al alcance, no se trata de quimeras o utopías». Artur Mas se ha puesto a su disposición para apoyarlas, pero ha matizado que no quiere oír hablar de «la lista del presidente» sino que pueden contar con él para diseñar «la lista con el presidente». «Que no es lo mismo», aseguró, y arrancó aplausos entre sus seguidores, que lo habían recibido en el Foment Cultural i Artístic de Molins de Rei (Barcelona) con gritos de «Independencia» y que finalizaron el acto entonando Els Segadors.

Mas aseguró que está dispuesto a ejercer el papel que se le asigne, por lo que abrió la puerta incluso a no ser él quien lidere la lista única transversal que ya anunció que quería diseñar tras lo que consideró «el éxito de la consulta del 9-N», pero ante la que encontró la oposición del resto de partidos políticos soberanistas –muy concretamente de ERC–. Por lo que, esta vez, dijo ayer, hace falta «unidad» aunque para ello «haya que dejar de lado a los partidos políticos», aunque a continuación aseguró: «CDC y yo mismo, allí estaremos», si así lo requieren las entidades soberanistas.

Pese a querer permanecer al margen de la lista única, sus diferencias con los republicanos siguen vigentes. El líder de ERC, Oriol Junqueras, que ayer fue proclamado candidato por su partido a los comicios del 27 de septiembre, destacó en el Consejo Nacional de la formación que ERC no lanza «una OPA a nadie», sino que simplemente busca que, tras esa cita electoral, haya una mayoría independentista «sólida» en el Parlamento catalán.

«Abrimos nuestros brazos para abrazar y darnos la mano con los que comparten estos objetivos. No tenemos ningún inconveniente en desear suerte a todo el mundo que comparta algunos de estos objetivos con nosotros», aseguró Junqueras.

«Nosotros dedicamos palabras amables a todos los que nos acompañan en este proyecto. De nuestra boca no salen ni reproches, ni amenazas, salen palabras de reconocimiento, de amabilidad, de acompañamiento, y ésta es la mejor actitud, la que deben tener aquellos que aman el proyecto compartido de la independencia», sentenció Junqueras.

ERC se propone para los comicios de septiembre, también considerados plebiscitarios, «implicar y seducir» a aquellas formaciones que, a pesar de no ser explícitamente independentistas, tampoco están «en contra» de la independencia, sino que respetarían el resultado de las urnas.