EL MUNDO 19/05/13
· Mas: ‘Esta gente va a ser combatida hasta las últimas consecuencias’
· Convoca a los partidos y a la comunidad educativa para hacer frente a la ‘ley Wert’
· Bildu pide ‘una respuesta de país’ que no acabe en un recurso ante el TC
La legislatura en Cataluña sale a casi una cumbre por semana. La que empieza mañana también tendrá la suya: Artur Mas ha convocado a los partidos políticos y al sector educativo para protestar contra la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), cuyo anteproyecto aprobó el viernes el Consejo de Ministros.
Consciente de que tiene a su lado en la defensa de la inmersión lingüística a todo el arco parlamentario catalán excepto al PP y a Ciutadans, el presidente de la Generalitat elevó ayer el tono de sus amenazas. «No bajaremos la cabeza ante esta gente que quiere dividir Cataluña. Esta gente será combatida por vías democráticas hasta las últimas consecuencias», dijo Mas.
El anuncio del ministro de Educación, José Ignacio Wert, de que el Estado detraerá de la financiación autonómica catalana el dinero para escolarizar en centros privados trilingües a los alumnos que prefieran este sistema al de la inmersión en catalán ha sublevado a la Generalitat y a la mayoría de los partidos.
Convergència i Unió (CiU) siempre ha tenido en el modelo educativo catalán un arma insustituible a la hora de ganar votos y presionar al Gobierno de turno. El Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), la otra gran formación de la comunidad, lleva muchos años defendiendo la inmersión en la misma línea que los partidos nacionalistas.
Así que Mas estaba seguro de que no se quedaría solo cuando ayer lanzó sus invectivas contra la ley Wert. Aprovechando una visita al minúsculo municipio de Torrelavit (Barcelona), el presidente de la Generalitat cargó contra una reforma que consideró como una «OPA hostil» contra Cataluña.
Además, se comprometió a luchar «hasta las últimas consecuencias» y «por todos los medios al alcance» del Gobierno catalán contra la nueva ley. «Defenderemos con uñas y dientes nuestro sistema educativo», afirmó. En opinión de Mas, las virtudes de la inmersión son muchas: «Nos proporciona conocimientos de nuestra lengua propia, conocimientos de otros idiomas y, además, cohesión social».
El presidente de la Generalitat anunció que la semana que viene convocará a representantes de los partidos catalanes y a agentes del sector educativo para expresar su oposición a la Lomce. «Reformas sí, OPA hostiles contra la escuela catalana, el catalán y nuestro autogobierno, no», remachó.
La consejera de Educación catalana, Irene Rigau, ya había usado un argumento parecido el viernes, cuando se opuso a la ley Wert por considerarla «inconstitucional» e «imposible de aplicar», además de criticar que invade competencias de la Generalitat. Otro consejero, en este caso el titular de Interior, Ramon Espadaler, también afirmó ayer que el Gobierno catalán recurrirá ante el Tribunal Constitucional (TC) la Lomce si el paso de la norma por el Congreso no depara «modificaciones sustanciales».
Pero no sólo miembros del Gobierno catalán salieron ayer en tromba para intentar provocar la reacción ciudadana. También se indignaron otros integrantes de CiU, entre ellos Oriol Pujol, que era secretario general de Convergència hasta que el partido le retiró temporalmente del cargo después de que fuera imputado en el caso ITV.
Para Pujol, la Lomce demuestra que «el PP es un partido anticatalán» porque «quiere destruir todo lo que la mayor parte de los catalanes quieren». «La Ley Wert no es sólo un ataque al catalán, sino también a nuestra convivencia y cohesión social. Combatiremos que quieran destruir lo que nosotros queremos», añadió.
Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), socio de Mas esta legislatura, se mostró convencida, por boca de su diputado autonómico Oriol Amorós, de que la Lomce no llegará a aplicarse. «La vamos a detener por los cauces legales, llevándola ante el TC; por la vía administrativa, ya que las autorizaciones que da la Generalitat a los centros educativos deben seguir la ley catalana, y porque el conjunto de la sociedad y la comunidad educativa la rechazan», afirmó.
Las principales formaciones de la oposición ya reaccionaron ayer a la propuesta de Mas de celebrar una cumbre contra la ley Wert. El PSC e Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) aceptaron a regañadientes, sabedores de que CiU aprovechará su presencia para transmitir una imagen de unidad de los partidos en torno al Gobierno catalán. Ambos grupos pidieron que en la reunión se hable de los recortes en Educación, además de la inmersión.
«Estaremos al lado del Govern para defender el modelo de escuela de Cataluña, en cuanto a lengua y competencias, pero también en defensa de un modelo de escuela pública de calidad», dijo el líder del PSC, Pere Navarro.