EL CORREO – 06/12/14
· Leen un comunicado en el que se preguntan cómo podrán probar que no se han guardado armas si las entregan.
PARÍS. «Nadie nos ha explicado cómo hay que autodisolverse», planteó ayer Zigor Garro ‘Tonino’ en nombre propio y de los otros seis etarras juzgados desde el 10 de noviembre en París. «¿Hay que hacer una declaración, otro vídeo, depositar las armas y los explosivos en la comisaría de Bayona o aquí mismo en la galería Saint Eloi (sede de los juzgados antiterroristas franceses)?», preguntó al Tribunal Especial de lo Criminal. En el banquillo de los acusados se sientan los exjefes militares Mikel Karrera Sarobe ‘Ata’ e Ibon Goieaskoetxea Arronategi ‘Emil’
El antiguo responsable del aparato logístico de ETA objetó que, aunque entregaran los arsenales, «¿cómo podemos probar que no nos hemos guardado ninguna de esas armas?». «La prueba definitiva nos la van a exigir», dijo. Incluso en la hipótesis de que se entregaran a la policía y confesaran, expuso que siempre se les reprocharía tener la experiencia y la pericia para fabricar armas, como los subfusiles copiados al modelo israelí Uzi que se confeccionaban en los talleres etarras.
En una declaración leída de pie en francés, Garro Pérez aportó matices novedosos al abandono de la violencia anunciado el 20 de octubre de 2011. «El nuevo totalitarismo democrático ha impuesto a la humanidad una guerra total y permanente. En ese marco, ETA ha parado la lucha armada. Todo el pueblo vasco se había convertido en diana del antiterrorismo y ETA, que nació con la vocación de su defensa, no quería servir de pretexto para que se le ataque, se le golpee y se le destruya», expuso.
Pero puntualizó que la renuncia a las armas no solo respondió a las «amenazas totalitarias» contra el pueblo, sino «a las posibilidades que se nos abren por delante». «Tras 60 años de lucha armada y no armada, el pueblo vasco ha salido de su agonía y está más cerca que nunca de lograr su libertad», valoró. «Quieren que seamos capaces de conseguirla sin recurrir más a la violencia. Haremos todo lo posible. Reafirmamos el compromiso absoluto y definitivo de ETA para que así sea», proclamó.
Garro acusó a los gobiernos español y francés de haber puesto todo de su parte en estos tres últimos años para frustrar el proceso de resolución del conflicto vasco. «La medida más significativa y grave es el sufrimiento inhumano e inaceptable causado por la política de alejamiento y dispersión de los presos», opinó antes de lanzar una velada advertencia sobre la posibilidad de una hipotética vuelta atrás. «Si España y Francia tratan de disuadir a ETA de volver a las armas deberían andarse con tiento de no encastillar a sus militantes en situaciones insostenibles», dijo. La declaración reiteró la acusación más habitual a Madrid y París de no querer la paz.
«El golpe genial consiste en sembrar la duda sobre la sinceridad de ETA y plantearnos exigencias imposibles», declaró. «La retórica policial es igual a sí misma. Nosotros no dejamos de reinventar modos de resistencia para avanzar en el largo camino de la paz y la libertad», señaló. «Si ETA ha decidido retornar a sus orígenes no armados, el pueblo vasco es el único ante el que se explicará, rendirá cuentas y será depositario legítimo de sus armas», concluyó.
EL CORREO – 06/12/14