Oh, Patxi

Santiago González, santiagonzalez.wordpress.com, 20/2/12

Hay una querencia en Patxi López que viene manifestándose desde hace años y que se manifiesta en el ambiente adecuado, por ejemplo, una entrevista con el diario ‘Gara’.

“Esta es la primera entrevista que concede a GARA”, dice el entrevistador. [Quiere decir quizá “desde que fue investido lehendakari”, porque ya ‘concedió’ una en noviembre de 2005, en la que dijo cosas muy notables, por ejemplo, que no descartaba un Gobierno con Batasuna en el País Vasco.]

¿Está en marcha ese diálogo? Lo estará.

¿Cuál es el papel del Gobierno que preside? Definir la ruta, como hice con el decálogo que presenté en el Parlamento y que está vigente tras el anuncio de ETA. Buscar consensos. Y liderar a la sociedad, que no puede ser ajena a todo esto y se debe implicar.

¿Cómo se hará eso? Habrá fórmulas. No trate de sacarme más.

¿En cuanto tiempo? No mucho. Lo podré decir cuando esté hablado y cerrado.

¿Contará con la izquierda abertzale para ello? Todos debiéramos entender que la izquierda abertzale forma parte de la sociedad vasca y que tiene su papel y sus responsabilidades. Entre ellas, la de completar ese recorrido de integración en la democracia.

 [Demos un pasito más para comprender lo descabellado de la respuesta: ¿Contará con ETA para ello? Todos debiéramos entender que ETA forma parte de la sociedad vasca y que tiene su papel y sus responsabilidades. Entre ellas la de completar ese recorrido de integración en la democracia.]

¿Está coordinado con el Gobierno español? En la conversación de La Moncloa trasladé al presidente todos estos asuntos y la necesidad de trabajar en esa dirección. Le dije que no lo entendiera como una debilidad, sino como fortaleza de un Estado de Derecho que en un tiempo como este hace lo que tiene que hacer y además es generoso. Espero que sea eso lo que haga el PP en el Gobierno. [O sea, la respuesta es no. Yo le dije, pero no cuento lo que él me respondió. Esa manera de no mentir, rehuyendo cuidadosamente la realidad.]

(…)

¿No se está vulnerando la ley cuando se mantiene en la cárcel a presos gravemente enfermos? Si eso es así… La ley se puede aplicar de una manera más restrictiva o de una manera más generosa. Creo que es el momento de aplicarla en la manera que está recogida en la Constitución, [¿Puede haber una manera de cumplir la Ley que no esté recogida en la Constitución?] que marca como objetivo de la política penitenciaria la reinserción del penado. Debiéramos entender eso como parte de nuestra fortaleza y utilizar los márgenes que nos da la ley. [Cumplir la ley en su cauce central, sin bordearla, es cosa de fachas].

Entre los presos, además de militantes de ETA los hay encarcelados por actividades políticas, periodísticas… O por actividades de connivencia con una banda terrorista. [Nótese que no le niega la mayor] Se dice mucho lo de los presos políticos, pero en política se puede defender todo en este país, [menos la violencia, por ejemplo y los hechos de las organizaciones terroristas, por otro ejemplo] lo que no se puede es utilizar la violencia para defender cuestiones políticas.

¿No es Arnaldo Otegi un preso político? He dicho en otras ocasiones que la permanencia de Arnaldo Otegi en prisión es contraria a la opinión y al sentimiento de la sociedad vasca.
 [El lehendakari de los vascos y las vascas cree que la opinión y el sentimiento de los vascos es fuente de Derecho.]

(…)

¿El 20 de octubre hubiera estado mejor en Ajuria Enea que en Estados Unidos? Estaba donde tenía que estar defendiendo los intereses de Euskadi. Sabiendo que el anuncio se iba a producir, no podía estar esperando cuándo, porque Euskadi no se para y tiene también otras prioridades [sobran ‘también’ y ‘otras’]. Yo me voy dentro de un mes a la India. No se puede suspender un viaje de estas características pensando en que tres encapuchados van a leer un comunicado.

Pero se sabía cuándo iban a leerlo… Y de hecho yo estaba aquí al día siguiente porque tenía mis billetes preparados.
 [Nunca ningún gobernante ha explicado tan paladinamente que los terroristas le marcan la agenda, aunque lo hicieran.]

(…)

Habla del relato, de la memoria, de las víctimas. ¿Melitón Manzanas es una víctima o un torturador? Ya, pero a los torturadores se les condena por la justicia, no se les asesina. Se le convierte en víctima cuando se le asesina.

Y, entonces, ¿”Argala” qué es, un terrorista o una víctima muerta en atentado? Pues también puede ser considerada una victi… yo no hago equidistancia entre las víctimas, ¿eh?, pero cuando se asesina a alguien también es una víctima, porque en un sistema democrático quien tiene que actuar es siempre la justicia. [Tal como ayer escribió Rorschach, qué gran ocasión perdida para refutar la falacia del entrevistador: Melitón Manzanas fue torturador y víctima; Argala fue terrorista y asesino, y también una víctima. El lehendakari lleva ya tres años en el cargo. Además de euskera podría haber aprendido algo de epistemología. Para ser una víctima no se necesitan condiciones de idoneidad moral. Basta la voluntad del victimario.]

(…)

¿Estamos en condiciones de hacer ese relato? Lo que no estamos en condiciones es de dejar de hacerlo. Si no, estaríamos definiendo una sociedad inmoral. ¿Alguien se puede imaginar, salvando todas las distancias, que después de la Alemania de Hitler se dijera que como aquí cada uno tiene su relato o su parte dejamos de hacer el relato de lo que significó el nazismo y el genocidio? Para mí, la sociedad que hiciera eso sería inmoral.

 [Salvando todas las distancias. Bien dicho. Y salvando también la actitud de los vencedores y de los dirigentes políticos y de los jueces. Nadie, en realidad, discutiría que aquello había terminado con vencedores y vencidos. Nadie imagina a un dirigente alemán tratando de condicionar al tribunal que juzgó al nazismo o mostrando comprensión por alguno de los allí condenados. Eso es Nuremberg y el proceso de desnazificación de Alemania, a ver si se entera este hombre.]

¿No fue ese el sustento de la transición española? Ehhh… la transición española no se hizo sobre el olvido, se hizo sobre la no venganza o la no revancha. Y aquí yo no estoy proponiendo un relato para la revancha, porque así la sociedad no avanza. Hablo de un relato para los valores éticos y democráticos que tienen que presidir la convivencia.

El Partido Popular acaba de enterrar a su presidente de honor, que fue ministro franquista… Y yo no acudí a pesar de que otros lo hicieron. [No soy sospechoso. Además, yo eché a Mariano Rajoy de la capilla ardiente de Isaías Carrasco en marzo de 2008, que lo sepa…]

“Harás y dirás más cosas que me helarán la sangre, llamando a las cosas por los nombres que no son”, le había escrito Pilar Ruiz. Eran cosas como éstas. Ayer, después de leer esta entrevista tuve una fuerte y desagradable sensación: el entrevistado no podía ser mi lehendari. López había renunciado a ello.

Santiago González, santiagonzalez.wordpress.com, 20/2/12