ABC – 27/10/15
· El nuevo Parlamento catalán visualiza los bloques a favor y en contra de la secesión.
Que la equidistancia nunca ha sido buena en Cataluña es algo que los socialistas conocen bien. De ahí su declive electoral. Catalunya Sí Que Es Pot (CSQP), la coalición bendecida por Podemos, no ha tomado nota de ello y, ayer, cinco de sus once diputados votaron a favor de la nueva presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell. Durante la constitución de la nueva Cámara catalana, la activista independentista lanzó un «¡Viva la república catalana!». Con sus votos –unidos a los de Junts pel Sí y la CUP–, la formación liderada por Lluís Rabell hizo suya esa declaración de intenciones.
Asegura este diputado debutante que se trata de una cuestión «técnica», resultado de un pacto entre grupos que ha permitido a CSQP tener un cargo en la Mesa del Parlamento autonómico. Y que, en ningún caso, ese voto se hará extensivo a la investidura de Artur Mas, cada vez más lejana, dada la negativa de la CUP a convertir en presidente a quien está acorralado por la corrupción de Convergència. A diferencia de sus compañeros de candidatura, a Mas no se le vio demasiado entusiasmado en esta nueva «jornada histórica» del secesionismo. Aires de nuevo adelanto electoral.
Esta primera sesión parlamentaria, en la que se mezcló la solemnidad de los diputados más veteranos con la frivolidad de los debutantes de la CUP y CSQP, visualizó la división física e ideológica entre el bloque independentista y el constitucional. A un lado, la bancada de Junts pel Sí y la CUP. Al otro, la de PP, Ciudadanos, PSC y CSQP. Los primeros aplaudieron en pie el discurso de Forcadell. Los segundos ni se levantaron de sus escaños.
«Declaración de ruptura»
Un discurso que se convirtió en una especie de «declaración de ruptura» de la flamante presidenta del «Parlament». Pronto vendrán las de verdad, según prometen los dirigentes de JxS. Visiblemente nerviosa, a Forcadell le temblaba la mano y hubo un momento en que se quedó en blanco. Prometió ejercer una presidencia «para todos, sin distinción de origen, lengua o voto», pero no tardó en entrar de lleno en la cuestión secesionista. «No seamos esclavos del pasado, pensemos en los próximos 300 años, no en los anteriores 300 años. Cerremos la etapa autonómica.
Hoy protagonizamos un momento fundacional, pues pasamos de un Parlamento regional con competencias recortadas a un Parlamento nacional», dijo. Advirtió de que el objetivo de esta legislatura es emprender «un proceso constituyente» y acabó su intervención con un «¡Viva la democracia, viva el pueblo soberano, viva la república catalana!».
«Veo que la nueva Presidenta (nivelazo) Parlament empieza la legislatura con ganas d bronca. Que no sufra, la tendrá», escribió Xavier García Albiol en su cuenta de Twitter. El líder del PP catalán, que se estrena como presidente de grupo, replicó a Forcadell por escrito con una jura como diputado, que secundaron sus otros diez compañeros de filas, en la que se compromete a respetar y cumplir el Estatuto y la Constitución, así como a «defender la unidad de España y la unidad de los catalanes frente a quienes quieren dividir nuestra sociedad». Los diputados del PP y los 25 de Ciudadanos –encabezados por Inés Arrimadas, jefa de la oposición– escucharon en pie el himno de Cataluña, «Els segadors», pero no lo cantaron.
Finalmente, la Mesa del Parlamento, órgano que gestiona la actividad parlamentaria, quedó constituida con Forcadell como presidenta, y Lluïs Corominas (JxS) y José María Espejo-Saavedra (C,s) como vicepresidentes primero y segundo, respectivamente. Las cuatro secretarías estarán ocupadas por Anna Simó (JxS), David Pérez (PSC), Joan Josep Nuet (CSQP) y Mariona Barrufet (JxS).
ABC – 27/10/15