EL MUNDO 16/12/13
La encuesta que ayer publicó EL MUNDO sobre los resultados que reflejaría un eventual referéndum sobre la secesión de Cataluña limita a un 35% el porcentaje de catalanes que apoyaría hoy en día la independencia. Una cifra, la más relevante del estudio, que a ojos de los dos partidos constitucionalistas con representación en el Parlament de Catalunya –PP y Ciutadans– demostraría la inexistencia de uno de los principales argumentos esgrimidos por los partidos favorables a la independencia: que la gran mayoría está por la ruptura definitiva con España.
«Que sólo el 35% se muestre dispuesto a votar a favor de la independencia constata que esa mayoría con la que muchos partidos se llenan la boca no es tal». Así lo señaló ayer el diputado del PP en el Parlament Santi Rodríguez, quien comparte su interpretación con el también diputado en la cámara catalana José Manuel Villegas (Ciutadans). «Cuando se habla de mayorías claras hay que tener cuidado», señaló el también secretario general de C’s, quien cree que los datos recogidos en el estudio demoscópico llevan a pensar que «el proyecto rupturista tiene la fuerza limitada que tiene», y que la sensación de que es la alternativa preferida está «alimentada por medios de comunicación públicos y subvencionados».
Cuestionados ambos por el 43% de los catalanes que según la encuesta de Sigma Dos para EL MUNDO estaría a favor de cambiar las relaciones con el Estado –es decir, que responderían sí a la primera pregunta de la consulta: «¿Quiere que Cataluña sea un Estado?»–, los dos políticos relataron lo que sus partidos vienen defendiendo: que la única forma de hacerlo pasa por la Constitución. «La Carta Magna actual permite cambiar las cosas», defendió Rodríguez, quien pese a que sólo el 39% de los catalanes desearía mantener el actual status quo, esgrimió el texto constitucional como la vía para cumplir con esas reivindicaciones que, por otro lado, atribuyó «a un momento de crisis en el que es normal que la gente que lo está pasando mal pida cambios».
Para C’s, en todo caso, esas reformas que reclama el 43% de los catalanes en sus relaciones con el Estado no deben ir dirigidas «a contentar a los partidos independentistas, que nunca se darían por satisfechos», sino que deben encaminarse hacia «una España ilusionante». Por lo que cree que ese porcentaje de personas descontentas con las actuales relaciones con el resto de España encajarían en el perfil del «federalismo» que, en todo caso, Villegas cree que «es con lo que vivimos ahora mismo». Así, propone medidas como la «eliminación de duplicidades» o «una mayor coordinación» para acabar de dar forma a ese modelo federal.
Ambos coincidieron también en señalar que el camino «no pasa por una consulta ilegal», sino por la convocatoria de elecciones anticipadas. «Con unas elecciones dentro de la ley no hay riesgo», sentenció Villegas.