Santiago González, santiagonzalez.wordpress.com, 9/10/12
El Mundo abre con una portada llamativa, con un titular que se queda casi en nada en los subtítulos. Es verdad que algún tipo de reacción sí supone el hecho de que cuatro miembros del Gobierno, el presidente, la vicepresidenta, el ministro de Justicia y el de Asuntos Exteriores hayan dicho algo sobre el desafío nacionalista catalán casi un mes después de la concurridísima manifestación de la Diada. Cabe preguntarse si es una reacción a la altura del retro que se le plantea. Leamos las palabras:
Rajoy: “Es un torpedo contra el bienestar y no lo aceptaré de ninguna de las maneras.
Soraya Sáenz de Santamaría: “Es un capricho”.
Gª Margallo: “Lo del Camp Nou da mala imagen”.
Ruiz-Gallardón: “España no sobrevivirá en el euro sin Cataluña”
Tal vez la declaración del presidente mejoraría con un poco más de concreción: cómo no toleraría, qué piensa hacer para impedírselo. La de la vicepresidenta es irrelevante, al igual que la del ministro de Asuntos Exteriores aquí reproducida. Es cierto que lo del Camp Nou da mala imagen, pero hay algo más que mala imagen. Vean esta foto:
A mí esta foto me recordaba aquella españolada de Agustín Navarro, con Antonio Ozores, ‘Quince bajo la lona’, pero en plan industrial. Hagan el cálculo de cuantos ciudadanos están bajo la estelada. Así, a ojo, unos 1.200. Ahora calculen el número de tapados por la estelada, que, por mero cálculo estadístico, no se sentían representados por esa bandera. Que no se sienten independentistas, en una palabra. Imaginen sus posibilidades de protestar, su frustración por una imposición totalitaria. Imaginen que en el partido de vuelta, unos derechistas extienden la bandera española del águila. Imaginenque unos desaprensivos, como los del Camp Nou, se la extienden por encima de la cabeza a dos docenas de votantes de CiU que han ido al Bernabeu acompañando a su equipo.
Pero vayamos al meollo. ¿Qué reacción gubernamental es esa, en la que dos ministros cualificados como el de Justicia y el de Exteriores alimentan la más dulce fantasía de Mas?. Lean otra expresión más relevante de García Margallo reproducida en titulares por ABC: “España tendría que asumir la deuda de una Cataluña independiente“. Háganse a la idea del subidón nacionalista: España nos necesita para sobrevivir en el euro, un motivo más para salirnos. España avalará nuestra permanencia en la UE como un Estado nuevo. Además, se quedan toda nuestra deuda, siguen comprándonos el cava y el Barça, en su liga. Tal como pintan las cosas Gallardón y Margallo, pónganse en la piel de un catalán y concluirán que haría falta ser muy gilipollas para no ser independentista.
Santiago González, santiagonzalez.wordpress.com, 9/10/12