EL CORREO 16/07/13
FLORENCIO DOMÍNGUEZ
Han pasado cuatro meses desde que se celebró el Foro Social y casi dos desde que se presentaron una serie de recomendaciones como supuestas conclusiones del foro. Al cabo de ese tiempo, la banda sale diciendo que dentro de unas semanas expresará su «opinión concreta» sobre esas recomendaciones. Es decir, saca un comunicado para decir que ya nos lo explicará en la próxima declaración. O en la siguiente.
El comunicado conocido ayer sólo expresa generalidades como que las recomendaciones, elaboradas ex profeso para ETA y sus presos, no se olvide, pueden ser «el punto de partida para acordar una hoja de ruta», al tiempo que reconoce la existencia de «desacuerdos concretos» que no enumera ni explica. Como la banda no entra en detalles, no se sabe el alcance de los desacuerdos.
El Foro Social y sus recomendaciones fueron iniciativas desarrolladas por la izquierda abertzale en un contexto de confusión de ETA y los suyos tras venirse abajo la hoja de ruta de Aiete después de que el Gobierno de Noruega expulsara de Oslo a los representantes de la banda terrorista y de que el inmovilismo etarra provocara el enfado de los verificadores. Con el Foro se trataba de ayudarle a ETA a buscar una nueva estrategia vestida con el aval de supuestos expertos internacionales. Cinco meses han pasado desde la expulsión de Noruega, pero ETA y los suyos siguen tan desorientados como entonces.
No les está resultando fácil reubicarse. No atienden los llamamientos que les hacen los partidos vascos para proceder al desarme unilateral y a su disolución, pero tampoco tienen una opción alternativa, porque consideran que negociar con los Gobiernos sobre el armamento es la única esperanza de conseguir como contrapartida la excarcelación de los presos. En las filas de ETA han aparecido algunas voces que, por vías internas, han reclamado que se busque una fórmula para el desarme apoyándose en personalidades internacionales y en la sociedad vasca. No hay constancia, sin embargo, de que la opinión de estas voces se haya convertido en la opinión de la organización terrorista.
El contenido del comunicado de ayer es sólo una forma de ganar tiempo, de prolongar la indefinición, mientras ETA sigue soñando con una negociación con España y Francia que no se va a producir. La falta de concreción en la declaración de ETA no va a servir de mucha ayuda en el debate que han puesto en marcha entre los presos sobre las recomendaciones del Foro, un debate cuyas conclusiones no se conocerán hasta octubre o noviembre.