ANTONIO BURGOS – ABC – 11/11/15
· Está actuando a la velocidad que debe frente a los separatistas. Hombre, que es el presidente, no el AVE de Barcelona.
Niño, dale hoy también al «On» del Modo Ironía, que se vea bien, porque hay que defender a don Mariano Rajoy, que a pesar las enormes prisas que se está dando desde hace cuatro años para atajar el problema del separatismo catalán, todavía vienen metiéndole bulla al grito de «Rajoy, que es pa hoy». No tienen en cuenta que los hombres no somos escopetas.
Es más, la mayoría ni siquiera tenemos permiso de armas: ¿cómo vamos a apuntar y a disparar a lo primero así como estrellado que se mueva al norte del Ebro y al sur de los Pirineos, que de momento nos separan de Francia, pero que al paso que vamos veremos a ver qué coño separan los Pirineos? Y en segundo lugar tampoco tienen en cuenta que solucionar el problema del separatismo catalán no es un huevo que se echa a freír, aunque sea un huevo estrellado sobre un lecho de papafritas como Junqueras y Mas. Porque en ese caso no habremos solucionado el problema independentista, pero habremos inventado los huevos rotos de Lucio en la Cava Baja. Lo cual tampoco está mal.
¿Cómo quieren que Rajoy haya acabando ya con el cuadro de las lanzas (y las cañas) de Mas, Junqueras, la Forcadell y demás ralea, si hace solamente un año que los catalanes sacaron en el Referéndum de la Señorita Pepis aquellas urnas de cartón con forma de microondas o aquellos microondas de cartón con forma de urna? ¿Cómo en un año, sólo en un año, van a tomarse medidas eficaces sobre unos tíos que siguen haciéndonos el continuo chantaje de que si no hay Casera de más dinero en los presupuestos nos vamos? Si veinte años no es nada en el tango, imagínense un año en la sardana separatista del 9-N.
Ahora hace justo un año. ¿Por qué a estos tíos les gusta siempre darnos por saco al resto de los españoles justo en la fecha en que no hay oficinas en Madrid, el día de la Virgen de la Almudena? (Y nosotros, en cambio, no nos atrevemos ni a toserles cuando es el día de La Merced o de San Jorge o una de esas fiestas suyas de ellos, que son tan suyos y tan de ellos).
Rajoy está actuando a la velocidad que debe frente a los separatistas catalanes. Hombre, que es el presidente del Gobierno, no el AVE de Barcelona, joé. Esto tiene un peluseo que la gente no tiene en cuenta. La gente sabe lo más mollar: el informe del Consejo de Estado y el recurso ante ese Tribunal Constitucional que ya han anunciado que se lo pasan por el forro de los paños de Tarrasa. No es que yo quiera justificar a Rajoy (ni Dios lo «premita»), pero es que el artículo 155 famoso de la Constitución no se puede aplicar así como así: ¡hala, a tomar por saco el invento! Hay que preparar un papeleo que está en marcha y parece que va ya al Consejo de Ministros.
Pero sólo una parte. «Sin ánimo de ser exhaustivos», como decía el otro que desapareció del mapa de la radio española, he aquí el papeleo que aún falta para que podamos aplicar todo el peso de la ley contra esos españoles que no quieren serlo; pero seguir trincando cuanta más tela puedan de España, sí quieren, hasta que les paguemos el viaje de ida sin vuelta.
A Rajoy le falta aún que la SGAE le conteste de quién son los derechos de autor de «Els Segadors»; porque como sean de Los Siete Niños de Pujol, vamos a tenerla. Le falta el informe de la Dirección General de Tráfico sobre el estado de los túneles del Garraf, porque es una independencia de Garraf, no de marca. Le falta el informe de la Agencia Estatal de Meteorología sobre el tiempo que hará el día que se decida a hacer lo que tiene que hacer. ¿Lento Rajoy actuando contra Cataluña? Demasiado rápido es lo que va.
Como que si lo pillan los mozos de escuadra que hacen las funciones de la Guardia Civil que echaron, seguro que lo multan por exceso de velocidad. En cuanto a los que quieren que mande a la Legión en plan general Batet en 1934, hay un grave problema: la cabra Pablito sabe desfilar muy derechita y garbosa por el Paseo de la Castellana, pero de La Diagonal no tiene puta idea. Se despistaría y sabe Dios dónde acabarían los del chapiri, con la cantidad de pasos por minuto que dan esos señores de verde y de pelo en pecho…
ANTONIO BURGOS – ABC – 11/11/15