Rufi Etxeberria reivindica abordar a ‘todas las víctimas en su globalidad’

EL MUNDO, 29/10/11

Traslada al lehendakari que ‘cada parte tiene que reconocer el dolor causado’
Pide tratar las ‘causas y consecuencias’ del conflicto para ‘construir el edificio de las soluciones’
López les recuerda la responsabilidad de la izquierda abertzale al ‘fomentar, mantener y apoyar la violencia’
Les pide ‘reconocer la verdad’ y les reclama reconocer el daño a las víctimas
Emplaza a Bildu a reconocer ‘la pluralidad política e identitaria del País Vasco’
El lehendakari analiza la situación tras el anuncio del cese de la violencia de ETA
Se reúne con Pello Urizar, Rufi Etxeberria y Oskar Matute como representantes de la coalición

El representante de la izquierda abertzale Rufi Etxeberria ha trasladado este viernes al lehendakari Patxi López el interés de abordar a todas las víctimas «en su globalidad y sin distingos entre las violencias», si se quiere crear un «marco de convivencia democrática», y ha elevado a 1.200 las víctimas de «estos cincuenta años de violencia», añadiendo en la cuenta las casi 400 víctimas que la izquierda abertzale atribuye a la actividad policial.

Patxi López, por su parte, ha trasladado a los representantes de Bildu la responsabilidad de la izquierda abertzale durante tantos años de violencia, así como la necesidad de que reconozcan el daño causado a las víctimas, y les ha emplazado a reconocer la pluralidad política e identitaria del País Vasco.

Etxeberria y López han hecho estas declaraciones tras la reunión que, portavoces de la coalición abertzale Bildu han mantenido con el lehendakari dentro de la ronda de reuniones que éste ha iniciado con los diferentes representantes políticos, sociales y sindicales tras el anuncio de ETA del cese definitivo de su «actividad armada».

La reunión ha comenzado con puntualidad absoluta en Lehendakaritza a las 4 y media de la tarde, adonde han acudido los representantes de la coalición abertzale, en medio de una gran expectación mediática.

Al término del encuentro, que ha durado alrededor de una hora, los portavoces de Bildu, Oskar Matute (Alternatiba), Pello Urizar (EA) y Rufi Etxeberria (portavoz de la izquierda abertzale), han ofrecido sus valoraciones del encuentro, en el que los tres han hablado como representantes de cada una de las formaciones que componen la coalición Bildu.

Etxeberria ha destacado que en estos cincuenta años de violencia ha habido «1.200 o más víctimas», una cifra que resulta de sumar cerca de 400 víctimas que la izquierda abertzale atribuye a la actividad policial a los casi 900 asesinatos de la banda terrorista.

El portavoz de la izquierda abertzale ha señalado en este sentido que para llegar a la verdad y la reparación de las víctimas, cada parte tiene que reconocer el dolor causado.

Etxeberria ha reconocido que se están dando pasos en el reconocimiento de las víctimas, con iniciativas como la ponencia sobre víctimas en el Parlamento Vasco, pero ha indicado que falta que sean tratadas y reconocidas en su conjunto.

El portavoz de la izquierda abertzale ha señalado que el encuentro mantenido con López es una reunión «capital», de mucha importancia, sobre todo porque es un punto importante para establecer «una dinámica normalizadora de relación», pero ha remarcado que si se quiere construir el «edificio de las soluciones», se tienen que tratar las causas y las consecuencias del conflicto.

Etxeberria ha dicho asimismo que una vez que ETA ha puesto fin al ciclo armado, los gobiernos de España y de Francia deben entablar conversaciones con ETA sobre cuestiones técnicas y logísticas derivadas del conflicto, pero también ha pedido una mesa de partidos en la que estén presentes todas las formaciones.

Ha pedido en este sentido que se implicen las instituciones, los gobiernos y los parlamentos de la comunidad autónoma vasca y de Navarra, por lo que ha solicitado a Patxi López que se reúna con Yolanda Barcina. Etxeberria ha reivindicado asimismo que para que el Parlamento Vasco sea válido, en él debe estar representada la izquierda abertzale.

Los tres portavoces de Bildu han coincidido en sus valoraciones al considerar que tanto el Acuerdo de Gernika como la Declaración de la Conferencia de Paz deben ser la hoja de ruta para abordar la actual situación.

El portavoz de EA, Pello Urizar, ha añadido por su parte que es necesario abordar cuanto antes las «consecuencias del conflicto», como ya se ha hecho en otros procesos de paz, para ganar así credibilidad y confianza, y así entrar en el tema de las víctimas.

Urizar ha considerado que en este proceso se tienen que implicar todas las distintas partes y ha recordado que «ninguna víctima lo es por propia voluntad», que «tiene que salir toda la justicia y la verdad» y ha reivindicado que no puede haber «víctimas de primera y segunda categoría».

El portavoz de Alternatiba, Oskar Matute, ha hecho por su parte una evaluación positiva de la reunión y ha destacado que ha habido comunicación en un lugar donde hasta hace poco no era posible.

López les pide ‘reconocer la verdad’

El lehendakari Patxi López ha explicado que durante la reunión ha trasladado a los portavoces de Bildu tres puntos fundamentales, entre ellos, la especial responsabilidad de la izquierda abertzale al «fomentar, mantener y apoyar la violencia durante tantos años». «Tienen que reconocer la verdad», ha recalcado.

López ha recordado a Bildu, asimismo, que tienen que «reconocer el daño a las víctimas y trasladarlo a las instituciones donde gobiernan». Además, el lehendakari ha hecho un llamamiento a Bildu para que reconozcan «la pluralidad política e identitaria del País Vasco» y abandonen «posicionamientos totalitarios».

El actual lehendakari, Patxi López, no se reunía con miembros de la izquierda abertzale desde julio de 2006, cuando, en calidad de dirigente del PSE, mantuvo en San Sebastián una entrevista con representantes de la izquierda abertzale, entre ellos el entonces líder de Batasuna, Arnaldo Otegi, Rufi Etxeberria y Olatz Dañobeitia.

Una reunión por la que López acabó en el banquillo por una causa por supuesta desobediencia, aunque el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco archivó finalmente el caso.

EL MUNDO, 29/10/11