EL MUNDO – 23/04/16
· La Generalitat ingresa 140.000 euros por las sanciones a comercios que no usan el catalán.
La Generalitat de Cataluña disparó el año pasado las multas que impone a los comerciantes que no utilizan al menos el catalán en los letreros, menús u ofertas de sus negocios. Así lo admitió ayer el propio Govern en una respuesta parlamentaria en la que plasmaron, en cifras concretas, el efecto de la polémica política lingüística para los comerciantes que utilizan otros idiomas. Según informó el Departament d’Empresa, el importe de las sanciones se elevó durante el año pasado en un 173%. Así, si durante 2014 las multas alcanzaron los 51.350 euros, el año pasado esa cifra se multiplicó hasta los 140.000 euros.
En la misma respuesta queda recogido también el número de empresas afectadas. En total fueron multadas 68 empresas a lo largo de 2015, mientras que el año anterior los agentes de Consumo de la Generalitat expedieron multas para 57 comercios. Se da la paradoja de que más de una veintena de las empresas multadas el año pasado tienen sus sedes fuera de Cataluña. Las más afectadas por el afán sancionador de la Generalitat fueron, como en años anteriores, bares y restaurantes de Barcelona que no incluyen el catalán en sus menús.
A lo largo de este 2016 las cifras están alcanzando el ritmo del año pasado. Hasta el pasado 6 de abril, última fecha registrada por el Govern, había un total de 89 empresas con expedientes sancionadores en trámite. Mas de 40 de ellas correspondían a denuncias de particulares y diez a empresas. El resto son expedientes abiertos de oficio por la Agencia Catalana de Consumo.
Las multas lingüísticas están incluidas en la Ley del Código de Consumo de Cataluña que se redactó en los últimos gobiernos de Jordi Pujol. Su puesta en marcha, sin embargo, no tomó cuerpo hasta la llegada en 2010 del tripartito –PSC, ERC e ICV– a la Generalitat. Fue en aquel momento cuando las sanciones a los comerciantes comenzaron a aflorar. Desde entonces, como evidencian los datos revelados ayer por el Govern, ningún Ejecutivo ha frenado la medida. El gabinete del ex president de la Generalitat Artur Mas incluso elevó el ritmo sancionador en pleno proceso soberanista.
El PP anunció ayer que registrará una proposición de ley en el Parlament de Cataluña para la supresión de las multas lingüísticas. En concreto los populares pedirán que se paralicen los expedientes sancionadores que estén en marcha «para que queden sin efecto y directamente archivados». También pedirán que se devuelva con carácter retroactivo el importe de las sanciones a los multados, además del interés legal, según anunció la diputada del PP María José García Cuevas.
EL MUNDO – 23/04/16