ABC – 25/05/15
· Los partidos soberanistas, especialmente los catalanes que tocan techo, parecen estancarse pese a haber dedicado gran parte de sus energías, y también del dinero público, a vender «proceso secesionista».
CiU pierde votos, y la plaza de Barcelona, mientras que sus socios de ERC ganan fuelle en las áreas metropolitanas. Pero la gran debacle electoral la firmó ayer Bildu, penalizado por su pésima gestión en el día a día. El único que salvó los muebles fue el PNV.
CIU: Primera fuerza en Cataluña con 110.000 votos menos
La federación que lidera Artur Mas confirma su desplome de votos, aunque se mantiene como primera fuerza en Cataluña, con 664.629 votos (99,36% del voto escrutado). Sin embargo, la cifra supone una sangría de casi 110.000 votos. Pierde su principal bastión, la ciudad de Barcelona, y desaparece en algunas poblaciones del área metropolitana, como Santa Coloma de Gramenet. Retiene, no obstante, la alcaldía de Gerona.
Si estos comicios eran una primera vuelta de las plebiscitarias de las autonómicas del 27 de septiembre, está claro que CiU es una formación en declive. Hace cuatro años, dio el «sorpasso» municipal y se convirtió en la fuerza más votada, con 778.042 votos (27,12%), lo que le proporcionó 3.860 concejales. En segunda posición quedó el PSC, otrora formación dominante, que pasó de los 924.773 votos de 2007 a 721.443. En Barcelona, ciudad gobernada por los socialistas durante más de 30 años, los nacionalistas ganaron por primera vez, convirtiendo la capital catalana en banco de pruebas de su nuevo credo independentista.
ERC: Junqueras capitaliza el voto independentista
La formación que dirige Oriol Junqueras crece en número de votos, aunque mantiene la tercera posición por detrás de los socialistas. ERC pasa de 257.564 votos a 507.526 (con el 99,36% de los votos escrutados) y gana fuelle en el área metropolitana. Como vasos comunicantes, se nutre del descenso de CiU. El nacionalismo catalán toca techo.
Tras los buenos resultados de las elecciones europeas de 2014, cuando ERC se convirtió por primera vez en la fuerza más votada en unos comicios en Cataluña, los independentistas aspiraban a extender su dominio municipal, como preámbulo de las elecciones del 27-S.
En 2011, ERC obtuvo 257.564 votos (8,98%), lo que se tradujo en 1.581 concejales, cifras inferiores a las obtenidas cuatro años antes. A los republicanos siempre se les ha resistido el área metropolitana de Barcelona, feudo socialista. Sant Vicenç dels Horts (Barcelona), fue una de las excepciones con Junqueras como cabeza de lista de ERC, que ha vuelto a ganar en estos comicios. De nuevo, Esquerra afianza su implantación en Gerona.
PNV: Recupera la Diputación Foral de Guipúzcoa y San Sebastián
El PNV consiguió ayer algo más de mil concejales en el cómputo global del País Vasco y se consolida como la primera fuerza política, de lo que se desprende que no ha tenido excesivo desgaste su gestión al frente del Ejecutivo de Vitoria en plena crisis económica.
Pero uno de los datos más significativos es que el partido de Iñigo Urkullu se coloca en plena disposición para arrebatar a Bildu la Diputación Foral de Guipúzcoa y el Ayuntamiento de San Sebastián. El PNV ha obtenido 18 representantes en las Juntas Generales de Guipúzcoa, cuatro más que los que logró en los comicios de hace cuatro años.
Además, arrebata al PP la Diputación de Álava, ya que ha obtenido 13 junteros, frente a los 12 de los populares. El PNV remata sus buenos resultados al mantenerse como primera fuerza en su feudo de Vizcaya. De esta manera, el llamado nacionalismo moderado regresa a sus mejores tiempos, ya que se pondría al frente de las tres diputaciones forales, instituciones claves de la autonomía vasca, y dos de las capitales. Su espina sigue siendo Vitoria.
BILDU: Debacle total de Bildu en sus feudos tradicionales
Además de la Diputación Foral de Guipúzcoa y el Ayuntamiento de San Sebastián, Bildu pierde la mayoría de sus feudos más tradicionales. Sólo le quedan, de cierta importancia, las plazas de Oyarzun, Rentería, Hernani y Llodio.
En Pasajes le han pasado factura sus chapuzas en torno al puerto y de ostentar la alcaldía ha quedado relegado al tercer puesto. Ha perdido también bastiones tradicionales de la «izquierda abertzale», como la Mondragón de Bolinaga, Vergara o Zumárraga. Perderá además Lezo porque ha empatado a concejales pero el PNV le gana en número de votos y como único bisagra queda el PSE. Se queda también sin el ayuntamiento de Lasarte, que lo han recuperado cuatro años después los socialistas y ha estado a punto de ocurrirle lo mismo con otro municipio emblemático, Andoain. En Elgoibar, tierra de Otegi, Bildu ha quedado en segunda posición, muy lejos del PNV. Análisis más reposados determinarán si el retroceso de Bildu responde a la irrupción de las marcas blancas de Podemos o al desgaste de su pésima gestión. O ambas.
ABC – 25/05/15