Juan Carlos Rodríguez Ibarra-Vozpópuli
  • Pablo Iglesias sabe que sin pacta sin condiciones con Sumar, los candidatos morados no lograrían puestos de relevancia en las listas

En una granja, convivían una gallina y un cerdo. Un día, la gallina invitó al cerdo a asociarse para poner un restaurante. Al cerdo no le pareció mala la idea. Le preguntó a la gallina por el plato estrella de la carta. La gallina respondió: “un par de huevos con jamón”. El cerdo, espantado, calculó el coste del plato. “Seguro que tú querrás que yo ponga el jamón y tú, los huevos”. “Exacto”, dijo la gallina. “No participo”, exclamó aterrado el cerdo; “tú, gallina, te implicas en el negocio, pero y, me comprometo a dar mi vida para ser jamón”. Se me vino esta fábula a la memoria cuando el pasado día 16 del mes de abril, vi la entrevista que Jordi Évole le hizo a la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz. Y, también, recordé las palabras que pronunció en el mismo mes, pero en el año 2017, en una entrevista radiofónica, el entonces líder histórico del nacionalismo gallego, Xosé Manuel Beiras, en referencia a Yolanda Díaz: “Yolanda Díaz fue la primera persona que me traicionó”.

No cabe la menor duda de que todas esas formaciones políticas aspirarán a ocupar el primer puesto en las futuras listas electorales bajo la denominación Sumar

Oyendo lo que Yolanda Díaz afirmaba sobre Pablo Iglesias, pensé que, tal vez, el líder en la sombra de Podemos, podría decir, después de la entrevista lo mismo que dijo Beiras: “Yolanda Díaz fue la primera persona que me traicionó”. El proyecto que ha puesto en marcha la Vicepresidenta segunda del gobierno, Sumar, se nutre de 15 organizaciones supuestamente a la izquierda del PSOE. Digo supuestamente porque todavía no sé las razones que permiten situar a esas formaciones y a la propia Yolanda Díaz en ese espacio de izquierda de la izquierda. Esos partidos son: Izquierda Unida, Más País, Catalunya en Comú, Coalició Compromís , Galicia En Común, Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía, Chunta Aragonesista, Verdes Equo, Alianza Verde,Coalición por Melilla (CpM),Proyecto Drago,Iniciativa del Pueblo Andaluz, Batzarre. No cabe la menor duda de que todas esas formaciones políticas aspirarán a ocupar el primer puesto en las futuras listas electorales que, bajo la denominación Sumar, se presentarán en todas la provincias españolas. Y seguramente ese sea el compromiso que hayan adquirido con Yolanda Díaz.

Y esa situación es la que pretende superar Podemos que no acepta bajo ningún concepto aparecer en esas listas como segundones, siendo Podemos el origen de todo lo que se ha derivado después como consecuencia de su relativo éxito a la hora de conseguir meter cabeza en el Gobierno de España. Pablo Iglesias y su formación saben que si pactan sin condiciones con Sumar, el primer puesto para la candidatura electoral por Madrid sería para Yolanda Díaz, el segundo para Íñigo Errejón de Más Madrid; en ese caso, Irene Montero tendría que conformarse con un tercer puesto. Lo mismo ocurriría en Aragón: La Chunta Aragonesista exigirá el primer puesto para un miembro de su formación, derivando a un segundo lugar a Pablo EcheníqueAlberto Rodríguez, líder del nuevo partido canario, Proyecto Drago, querrá el primer puesto para las listas de las Islas, máxime después de los acuerdos a lo que ha llegado con Verdes Equo Canarias y con Canarias Verde, desplazando por tanto a un segundo puestos a los representantes de Sí Podemos Canarias. Y así, por el momento, hasta 15 ocasiones en las que Podemos quedaría relegado a un segundo nivel que es imposible que acepten.

  • Si la vicepresidenta segunda aceptara la celebración de primarias abiertas lo más seguro es que Sumar se quedara con ella y con Podemos

Esa y no otra es la razón de que Pablo Iglesias, en nombre de Podemos, exija el compromiso de la convocatoria de elecciones primarias abiertas antes de firmar cualquier tipo de acuerdo con Sumar. Unas primarias con Podemos dentro de Sumar daría toda la ventaja a los candidatos de la formación morada. Pablo Iglesias y los suyos son los que dominan ese tipo de selección de candidatos que Yolanda Díaz debe saber que contienen un alto nivel de fraude por falta de control sobre el censo electoral. Si la vicepresidenta segunda aceptara la celebración de primarias abiertas lo más seguro es que Sumar se quedara con ella y con Podemos; el resto de formaciones que han pactado integrarse en Sumar cogerían la calle del medio y abandonarían el paraguas que prometía convertir en diputados a todos los que se refugiaran en el mismo.

En definitiva, como la fábula del cerdo y la gallina. En Sumar, Yolanda Díaz se implica pero el Podemos de Pablo Iglesias se compromete al dar su apoyo a Sumar para, a continuación, morir.