El portavoz del Govern, Jordi Turull, desafió ayer al Gobierno al sugerir que si quieren identificar a los «responsables» del referéndum del 1 de octubre considerado ilegal por el Tribunal Constitucional (TC), únicamente deben mirar hacia los miembros del ejecutivo de Carles Puigdemont. El también consejero de Presidencia reaccionó así a las últimas advertencias del gabinete de Mariano Rajoy, entre ellas el ultimátum a interventores y gestores económicos de la Generalitat para que no aprueben ningún pago vinculado con la votación independentista. En caso contrario podrían responder con «responsabilidades penales o contables».
Turull instó ayer al Gobierno a dejar a un lado a los funcionarios y mirar directamente al Palau de la Generalitat. Si el Gobierno quiere identificar los «nombres y las caras» de los responsables de «cualquier decisión, cualquier gasto, directo o indirecto, sobre el referéndum del 1-O», dijo, «lo que debe hacer es mirar una foto del gobierno catalán, porque el presidente, el vicepresidente y todos los consellers asumirán toda la responsabilidad de manera conjunta». Cabe recordar que en las dos últimas semanas el Govern ha realizado cambios en el ejecutivo y entre sus altos cargos, precisamente, para sustituir a quienes no estén dispuestos a llegar hasta el final con el referéndum y asumir las consecuencias, entre ellas afrontar posibles pérdidas de patrimonio.
El portavoz del Govern minusvaloró la estrategia del Gobierno de requerir documentación de forma constante, con entregas semanales, a los funcionarios de la Generalitat para fiscalizar todos los gastos. «Dejen a los funcionarios de la administración catalana que sigan haciendo su gran labor de manera correcta sin inundarles con papeleo», sostuvo. «Si se piensan que con este trabajo, con este papeleo que piden, podrán parar alguna cosa, están muy equivocados», les advirtió.
El control económico estricto que el Gobierno ha adoptado sobre la Generalitat tomó forma el sábado, cuando el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó la posibilidad de congelar las transferencias del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) si se usan fondos públicos para sufragar gastos del referéndum. Una medida que Turull también menospreció ayer al asegurar que la Generalitat ya transmite «toda la documentación» sobre sus cuentas porque «desgraciadamente» la administración catalana está intervenida desde hace años. «Que los miren [los papeles], está todo perfectamente documentado».
En la misma línea dura que inauguró el president este fin de semana, el portavoz del Govern retó también al Gobierno a «mirar sus gastos destinados a informes falsos de las cloacas del Estado», en referencia a las acusaciones de guerra sucia de la que acusan al Ministerio del Interior. En declaraciones a la agencia Efe, Turull insistió en que el Gobierno «mire lo que han gastado en informes falsos de las cloacas del Estado o por qué no han sido tan vigilantes con los 60.000 millones destinados al rescate de la banca o los 1.400 millones para la plataforma Castor».