EL MUNDO 03/09/14
· Iker Casanova, condenado a 11 años, sustituye a la portavoz de Bildu Laura Mintegui
De nuevo, un condenado por terrorismo vuelve al Parlamento vasco. Primero fue la Audiencia Nacional y después el Tribunal Supremo los que firmaron la sentencia contra Iker Casanova por pertenencia a organización terrorista.
Casanova tomó ayer posesión en Vitoria como nuevo parlamentario vasco. Fue condenado a 11 años de prisión por su pertenencia a Ekin, estructura de la izquierda abertzale integrada en ETA.
El nuevo parlamentario vasco sustituye a la hasta ahora portavoz de Bildu Laura Mintegi. Casanova era el siguiente de la lista de la coalición soberanista por Vizcaya en las pasadas elecciones autonómicas. Fue condenado en el marco del sumario 18/98 instruido por Baltasar Garzón contra varias organizaciones del entorno de ETA. Salió de prisión en 2011.
Natural de Barakaldo (Vizcaya), tiene 41 años, es miembro del Consejo Político de Sortu, en el que es responsable de Formación.
Una de las batallas políticas en la lucha contra ETA y su entorno fue tratar de impedir que en las formaciones que se presentaran a los comicios hubiera candidatos contaminados. Se trataba de que en las listas de la izquierda abertzale no hubiera nombres vinculados directamente con ETA. Ahora, de nuevo, esos nombres llegan otra vez al Parlamento vasco.
El malestar en el mundo de las víctimas es muy importante. Desde Dignidad y Justicia, la asociación liderada por Daniel Portero, se recuerda que, no hace tantos años, cuando aparecían nombres de candidatos vinculados con ETA se acudía a los tribunales y la formación podía llegar a ser ilegalizada.
Recuerdan también cómo, cuando comenzaron las excarcelaciones por la aplicación de la sentencia de Estrasburgo por la doctrina Parot, las víctimas acudieron en amparo a la defensora del Pueblo. En aquella ocasión, Soledad Becerril remitió al Gobierno una serie de recomendaciones. Entre ellas, reclamó al Ejecutivo de Rajoy un cambio legislativo «para incluir entre los requisitos de ejemplaridad que debe cumplir un ciudadano para ejercer un alto cargo, el no haber sido condenado por delitos de terrorismo». Desde el Ejecutivo se recibió esta recomendación con buenos ojos. Ayer, en Vitoria, la petición de la defensora del Pueblo quedó de nuevo en papel mojado.
Otro de los compromisos que el Ejecutivo puso sobre la mesa al principio de la legislatura fue llevar a cabo las reformas necesarias para que aquellos que dejaron el País Vasco y Navarra por la amenaza de ETA pudieran votar de nuevo en su comunidad autónoma. La propuesta sigue paralizada en el grupo parlamentario, pendiente de pactarla con otras formaciones.
Iker Casanova se convierte en parlamentario de la coalición soberanista después de que Mintegi entregara la semana pasada sus credenciales como parlamentaria vasca para volver a ocupar su cargo en la universidad. Tomó posesión ayer ante la Mesa del Parlamento, ya que no había ningún Pleno programado para los próximos 15 días.
Tras recoger sus credenciales, aseguró ayer que trabajará en la Cámara de Vitoria con dos «objetivos» principales: la liberación nacional y el cambio social. Añadió que afronta esta nueva etapa con «toda la energía, la dedicación y la ilusión posibles». «Estamos viviendo tiempos importantes en lo que hace referencia a la liberación de los pueblos de Europa, y pensamos que en Euskal Herria todo este fenómeno tiene que tener su reflejo», expuso el nuevo parlamentario en un vídeo que difundió EH Bildu en Twitter.