Luis Haranburu Altuna-El Correo

  • La cancelación del premio a la autora palestina Adania Shibli en Fráncfort la convierte en chivo expiatorio del odio y la sinrazón

En el desierto de Néguev, una patrulla de sudorosos soldados israelíes rastrea entre la arena de las dunas, siguiendo los ladridos de un perro lejano. Pero no hay rastro de terroristas ni de infiltrados. El abrasivo calor impide ver en la distancia, pero finalmente el comandante de la patrulla ha dado con ellos. Se trata de un grupo de beduinos inofensivos a primera vista, pero también puede que se trate de terroristas infiltrados. El comandante ordena acabar con ellos y sus camellos, y los soldados israelíes disparan de modo casi rutinario. La sangre de los hombres y los animales impregna la arena del desierto, mientras el comandante se seca el sudor de la frente. El grupo de beduinos ha sido masacrado. Pero uno de los soldados advierte un bulto negro en el pliegue de la duna. El soldado se aproxima y se encuentra con una adolescente «acurrucada dentro de su ropa negra como un escarabajo». Al lado de ella hay un perro que comienza a ladrar. El comandante decide llevar a la chica al campamento.

Esa noche, durante la cena de celebración, el comandante felicita a sus hombres, ensalzando su misión: borrar los «sentimientos nacionalistas estériles» de los árabes y plantar las semillas fértiles de la expansión del pueblo hebreo. Solo ellos pueden hacer «florecer» el desierto «desolado», dice. Al final, el comandante ofrece a sus hombres una opción con respecto a su prisionera: ¿deberían poner a la niña palestina a trabajar en la cocina del campamento? ¿O la compartirán entre ellos?

La autora, Adania Shibli, describe con minuciosa frialdad la violación en grupo de la niña secuestrada, que finalmente es asesinada y enterrada en la arena del desierto. La novela consta de dos partes; la primera está escrita en tercera persona y la segunda, en primera. El protagonista central de la primera parte es el comandante a quien un escorpión ha picado mientras dormía. El comandante está obsesionado por la higiene y el orden. Un sádico que permanece despierto por las noches sufriendo los dolores y molestias de la picadura del escorpión. Es un ocupante, un hombre en guerra, y Adania Shibli revela su siniestro poder lentamente, con minuciosidad. La escritura de Shibli es tranquila y controlada, lírica en sus descripciones de crueldad e incertidumbre. El terror que evoca se intensifica lentamente hasta que se hace insoportable.

Los hechos reales de la violación grupal acontecieron en el año 1949 y veinticinco años más tarde fueron objeto, como un detalle menor, de una breve noticia en la prensa israelí. Pero el detalle menor conmocionó a una joven palestina que decide investigar los hechos. Lo que debería ser una búsqueda ordinaria se convierte en una pesadilla logística para alguien que vive bajo la ocupación. A los habitantes de Gaza se les prohíbe la libre circulación. Millones de personas están confinadas en áreas controladas, con un draconiano sistema de permisos si desean viajar de una zona a otra. La segunda parte de la novela narra con minuciosa precisión los pequeños detalles que jalonan la búsqueda de información por parte de la joven palestina.

La breve e impactante novela de la escritora palestina Adania Shibli ‘Un detalle menor’ es una novela política, como sus otras dos anteriores, y ha merecido distintos galardones en el ámbito internacional. Fue seleccionada para el LiBeraturpreis 2023 por la organización alemana LitProm. Inicialmente la ceremonia de entrega de premios en la Feria del Libro de Fráncfort estaba prevista para el 20 de octubre de 2023, pero LitProm canceló la ceremonia en la Feria del Libro y la pospuso, ‘sine die’, en respuesta a las protestas de periodistas alemanes que achacaban a la novela actitudes antisemitas.

A raíz de la cancelación, más de mil autores e intelectuales, entre ellos Colm Tóibín, Hisham Matar, Kamila Shamsie, William Dalrymple y los premios Nobel Abdulrazak Gurnah, Annie Ernaux y Olga Tokarczuk, han criticado la decisión de la Feria del Libro de Fráncfort.

La guerra entre Hamás e Israel no ha sido ajena a la cancelación del premio que la autora iba a recibir. La brutal acción terrorista de Hamás que ha provocado la reacción de Israel está a punto de incendiar todo Oriente Próximo. La toma de más de doscientos rehenes no es ‘un detalle menor’, pero ello no debería ser motivo para que una escritora como Adania Shibli sea convertida en chivo expiatorio del odio y la sinrazón.

Hay cancelaciones que se convierten en aclamaciones y es el caso de la novela de Shibli, que se ha convertido en justa denuncia de la cruel situación que sufren los dos millones de gazatíes, convertidos en víctimas propiciatorias del terror de Hamás y de la desorbitada represalia israelí.

Refiriéndose a la literatura, Adania Shibli ha declarado: «La escritura es el espacio de libertad más íntimo que yo he conocido en mi vida». La cancelación de ese espacio de libertad personal no deja de ser una suerte de violación. Un detalle no menor.