A pesar de los buenos augurios de la ‘cocina de Tezanos’, es tanta la preocupación de los socialistas que casi a contrapelo han sacado a mitinear, ‘in extremis’, a Felipe González
La campaña electoral andaluza está quedando desnaturalizada debido a la presencia y protagonismo absoluto de la mayoría de los dirigentes estatales de los partidos, a excepción de Pedro Sánchez que estará durante casi toda la campaña en viajes de Estado por América y Europa. El presidente solo ha previsto dos actos electorales junto a Susana Díaz, el primero de los cuales se celebró ayer domingo. El segundo está en el aire, pendiente de la agenda europea de Sánchez. En el PSOE, Susana Díaz, es la gran estrella, como ella quería, pese a que media docena de ministros tengan previsto bajar al sur durante esta campaña. Eso sí, tras soltar miles de millones en los últimos meses para Andalucía.
Sánchez y Díaz solo van a coincidir en dos actos electorales, uno ya celebrado, y el segundo en el aire, pendiente de la agenda europea del presidente
Casado exime de responsabilidad a Juanma Moreno
Ha sido el propio Pablo Casado, tras los primeros compases de la fanfarria electoral, quien ha definido estas elecciones como una “primera vuelta de las generales” que podrían adelantarse incluso a las municipales, europeas y autonómicas de 2019.
Casi medio centenar de actos protagonizará el nuevo líder de los populares antes del 2D, arropando permanentemente a un candidato políticamente débil como Juanma Moreno y, de paso, asumiendo la plena responsabilidad de lo bueno o lo malo que le suceda a su partido en las urnas. Y es que el PP, tal y como ha diseñado su campaña, ha preferido abordar las autonómicas andaluzas en clave interna. Casado, que se instalará casi todo el tiempo en Andalucía, ha metido mano en la confección de las listas, colocando a gente que supone de su cuerda, los pocos andaluces que en las primarias internas apostaron por él frente a Cospedal y Soraya, que las ganó apoyada por Arenas y Bonilla.
Pablo Casado participará en 50 actos, asumiendo la plena responsabilidad de lo bueno o lo malo que le suceda a su partido en las urnas
Después han pretendido crear una imagen de unidad del partido que no se corresponde con la realidad que se percibe. Las caras y las expresiones de sus dirigentes sureños – por favor, sigan el rostro de Zoido– delatan preocupación, mucha preocupación, y por si faltaba algún ingrediente desestabilizador ahí quedó como brújula de análisis permanente en campaña el “CIS de Tezanos”, algo que ha irritado especialmente a los populares. Y eso que refleja que casi el 60% de los andaluces quiere cambiar el color del gobierno, pese a que da por ganadora indiscutible a Susana Díaz.
La plana mayor de Cs esconde a Juan Marín
La encuesta del organismo oficial si perjudica a alguien es al PP-A, beneficiando a Ciudadanos que prácticamente tiene anulado a su candidato Juan Marín – el mismo que ha ayudado a Susana a gobernar durante tres años largos– acaparando casi todo el protagonismo la jefa de la oposición en Cataluña Inés Arrimadas y el propio Albert Rivera. Ambos atacan estos días por el flanco que más pupa pueden hacerle a Susana Díaz y al PSOE-A las contemplaciones del gobierno Sánchez –y sus socios coyunturales de Podemos– con el independentismo catalán. Esa quizás sea una de las claves de la subida espectacular que Tezanos vaticina para Ciudadanos y que prácticamente duplicaría sus resultados.
Albert Rivera e Inés Arrimadas acaparan todo el protagonismo en Cs, desplazando al ‘socio’ de Susana Díaz, Juan Marín
Es tanta la preocupación de los socialistas que casi a contrapelo han sacado in extremis a Felipe González a mitinear, con el patrocinio de la Cajasol que preside el amigo de la presidenta Antonio Pulido. Por cierto, ningún partido ha querido abrir la boca siquiera para opinar qué les parece la reciente ruptura del Pacto de Accionistas con la Caixa, en lo que muchos califican como una “privatización encubierta” –favorable a los intereses del PSOE– de una fundación donde sobra el dinero –20 millones año– y faltan auditorías y transparencia en su gestión. Mutismo total.
No parece, tras escuchar los primeros compases de la campaña, que cambie mucho la partitura que ejecutan las distintas formaciones. La cuenta atrás para la gran encuesta ha comenzado y, a día de hoy, la clave fundamental va a estar en el índice de participación de los electores andaluces el día 2, un dato que la cocina de José Felix Tezanos no nos ha ofrecido en lo que más bien parece un arma de propaganda e intoxicación (política) masiva.
La noche del primer domingo de diciembre, todos lo creen, será larga y no exenta de tensión. Añadan a eso que PP, Ciudadanos y Adelante Andalucía han jurado que no votarán, llegado el caso, a Susana Díaz como presidenta. ¿Repetición de elecciones? Veremos.