ABC 02/04/13
«Koala», acusado de atentado terrorista, eludió la prisión tras abonar 6.000 euros.
· Atentado terrorista Al beneficiado por la solidaridad batasuna le acusa el juez de la colocación de un artefacto.
El miembro de Resistencia Galega (RG) Héctor José Naya Gil, alias «Koala», detenido por agentes del Cuerpo Nacional de Policía en septiembre de 2012, pudo eludir la cárcel gracias a que la fianza de 6.000 euros que le había impuesto el juez fue sufragada en gran parte gracias a una colecta llevada a cabo por la «izquierda abertzale» durante unas jornadas convocadas por los herederos de la trama juvenil Segi.
En un auto dictado en diciembre de 2012, el magistrado de la Audiencia Nacional Eloy Velasco imputaba a Naya Gil, junto a los también militantes de Resistencia Galega Xurxo Rodríguez Oliveira y Diego Santín Montero, los delitos de pertenencia a organización terrorista y de colocación de explosivos. Se les considera autores de la bomba que el 9 de agosto de ese año estalló en una instalación de antenas de radio, telefonía y televisión analógicas, ubicada en el monte Sampaio, a las afueras de Vigo. No hubo que lamentar desgracias personales, pero los daños materiales se elevaron a 7.300 euros.
Acampadas de Segi
Mientras mantenía en prisión a los otros dos integrantes del «comando», el juez impuso a Naya Gil el pago de una fianza de 6.000 euros, además de diversas medidas cautelares, como la obligación de comparecer cada 15 días en el juzgado y la retirada de su pasaporte.
Pocos días después, «Koala» pudo abonar la cantidad exigida y de esta manera quedó en libertad. Ello fue posible porque la «izquierda abertzale» echó mano de su «caja B» y aportó una elevada cantidad de esos 6.000 euros que establecía la fianza. Según fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por ABC, el dinero había sido recolectado en una de las «Gazte Topaguneak», acampadas que organizaba Segi y ahora sus sucesores, y que reúne a grupos juveniles afines procedentes del resto de España e incluso del extranjero. Se da la circunstancia de que uno de estos grupos más asiduos es la Asamblea da Mocidade Independentista (AMI). Una trama juvenil de la que se nutre Resistencia Galega para reclutar a nuevos activistas y suplir las numerosas detenciones. Fuentes policiales no descartan que haya más casos de fianzas impuestas a detenidos de Resistencia Galega que son abonadas, al menos una parte importante, por grupos de la «izquierda abertzale».
Hace unos años, por ejemplo, Jarrai –antecesora de Segi– y AMI llevaron a cabo una campaña conjunta de «kale borroka» contra agencias inmobiliarias en un intento de captar simpatizantes entre jóvenes que no podían acceder a la compra de una vivienda.
Sintonía con Goirizelaia
Este marco de colaboración es posible, recuerdan los medios consultados, gracias a las estrechas relaciones que desde hace años mantienen independentistas gallegos y vascos. Destacados representantes de la «izquierda abertzale» como la abogada y exdirigente de Batasuna Jone Goirizelaia, el sociólogo Justo de la Cueva y el autodenominado intelectual de izquierdas Iñaki Gil de San Vicente participan habitualmente en jornadas independentistas que organizan dirigentes del denominado Movimiento de Liberación Nacional Galego, un vasto conglomerado integrado por abogados, frentes de reclutamiento, adoctrinamiento y financiación, en el que se escudan los terroristas de Resistencia Galega para cometer atentados. En estas jornadas, los batasunos exponen sus experiencias y describen la actividad de ETA como una «lucha por la liberación nacional», lo que, de acuerdo con los medios consultados, da alas a Resistencia Galega.
En estos foros independentistas, los discursos concluyen con expresiones como «gora Euskal Herria askatu» (viva Euskal Herria libre). Independentistas gallegos próximos a AMI han apoyado causas emprendidas por la antigua Batasuna como, por ejemplo, la huelga de hambre que llevó a cabo el que fuera pistolero del «comando Madrid» Ignacio de Juana Chaos.
ABC 02/04/13