ABC 27/05/14
· El triunfo republicano obliga al presidente a inmolarse con una consulta ilegal
Poder municipalista Junqueras prefiere esperar a que la crisis amaine y ganar poder territorial en las municipales
Aunque previsible, la victoria de los republicanos en las elecciones europeas ha provocado desconcierto en la Ejecutiva de Convergència i Unió (CiU), reunida ayer para analizar unos resultados que no han sido buenos para ellos. Por primera vez desde la Transición, Esquerra ha ganado a los nacionalistas en unos comicios, lo que refuerza su poder de influencia en el Gobierno catalán, con el que tiene un acuerdo de legislatura. La invitación del presidente Artur Mas a que la formación que lidera Oriol Junqueras entre a formar parte de su Ejecutivo sigue vigente, pero los republicanos se resisten a compartir el desgaste gubernamental y ya han comenzado a trabajar en las elecciones municipales de 2015, una vía para lograr poder territorial ante un previsible anticipo de los comicios autonómicos cuando el Estado prohíba la consulta secesionista.
Una consulta que Mas se ve obligado a celebrar por la presión que supone el triunfo republicano, máxime después de haber asegurado que no piensa dar ni un paso atrás en su proyecto. Para Mas, compartir Gobierno con Junqueras implicaría neutralizar a quien ahora marca la hoja de ruta separatista, pues se vería obligado a aplicar medidas ingratas contra la recesión económica.
Por eso, ERC quiere ganar tiempo y esperar a que la economía se recupere. Unió no quiere que los republicanos entren en el Ejecutivo catalán y, aunque el propio líder socialcristiano y portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, aseguraba ayer que la puerta está abierta y que son los republicanos quienes no han querido hasta ahora cogobernar con CiU, lo cierto es que UDC se ha convertido en interlocutor de sectores empresariales inquietos ante un posible regreso de ERC al poder. La experiencia del tripartito –PSC, ERC e ICV– fue traumática y todavía escuece en un sector que ante esta espiral de euforia separatista ha sustituido la prudencia por la advertencia. Fue UDC la que evitó que CiU se presentara a las elecciones europeas coaligada con ERC, lo que irritó al sector más independentista de Convergència. Pero los equilibrios en la federación son cada vez más difíciles y Duran prefiere centrar el debate no en el peso republicanos en el mandato de Mas, sino en la celebración de la consulta. Por eso, instó al Gobierno español a «mover ficha» ante el triunfo de las fuerzas partidarias del derecho a decidir, en las que CiU incluye a a ERC, ICV y Podemos. «Las fuerzas del Estado no pueden hacerse los sordos ante este resultado electoral de las fuerzas que defienden la consulta. No pueden continuar con su actual inmovilismo, diciendo “no” a todo», dijo.
Aceleran la ley de consultas
Un día después de que Esquerra arrasara en Cataluña, el Parlamento autonómico ha acelerado la tramitación de la ley catalana de consultas con la que Mas quiere convocar el referéndum del 9 de noviembre. La ponencia encargada de elaborarla ha sido fijada para el viernes.