Iñigo Urkullu, presidente del EBB del PNV, niega que planteara una posible política de pactos en el País Vasco a José Luis Rodríguez Zapatero, en el último encuentro que ambos han mantenido en Moncloa, según reconoció en un encuentro con este periódico.
«Se equivoca el lehendakari López si piensa que en mis viajes a Madrid estuviera pensando en pactos», añadió Urkullu, consciente de que cualquier acuerdo con los socialistas vascos se antoja «imposible. «El PSE ya tiene un pacto cerrado con el PP. En campaña ya dijeron que habría que extenderlo y el propio lehendakari aseguró a Basagoiti que no pactaría con Bildu».
Precisamente el posicionamiento sobre Bildu agranda las profundas diferencias estratégicas que ahora mismo se detectan entre PNV y socialistas vascos. Además, Urkullu no desaprovecha esta contingencia para recordar que el veto del PSE a posibles acuerdos políticos con la coalición abertzale «choca» con la estrategia aceptada por el PSOE en Madrid de favorecer la integración de los radicales en alas instituciones para así «dar pasos para un nuevo tiempo», recuerda el presidente del EBB.
En su fuero interno, Urkullu mantiene vivo el rechazo del PSE a la propuesta que hace dos años formuló a Zapatero para conformar un Gobierno sólido y estable con los socialistas en Euskadi, que conllevaba «una corresponsabilidad en lo que pudiera ser la gobernabilidad del Estado». El PNV cree que el pacto PSE-PP anula cualquier otra posible operación. En base a este posicionamiento, Urkullu entiende que la nueva correlación de fuerzas que se desprende de las últimas elecciones locales, con una profunda mayoría nacionalista, debería hacer «reflexionar» a los dos partidos constitucionalistas porque «quieren vetar una posible opción de gobierno que representa al 70% de los vascos». Para el líder jeltzale, «están mirando al pasado y nosotros al futuro».
Sobre este escenario transcurrirá hoy una parte de la Asamblea Nacional del PNV, que se reunirá para reforzar las líneas estratégicas ante la constitución de los Ayuntamientos y Diputaciones. «Vamos a seguir abogando por el fortalecimiento de la institucionalización de Euskadi, sea que nos corresponda estar en la oposición o en el gobierno», recuerda Urkullu ante la cita en la que están convocados los 72 miembros de este órgano, a quienes se sumarán los distintos cargos de la formación.
Horas antes se reunirá también el EBB, en una jornada donde también se incluye el encuentro con una delegación de Bildu. Con la coalición abertzale está sobre la mesa la posibilidad de un acuerdo en Guipúzcoa en base a la primera conversación ya mantenida en San Sebastián, pero, sobre todo, cómo encauzar el ofrecimiento de Bildu para que el PNV gobierne la Diputación de Álava. Urkullu ya ha adelantado su intención de que este ofrecimiento sea recogido dentro de un acuerdo programático. «No renuncio a la gobernabilidad, pero a la hora de sentarnos en una mesa, me niego a pensar en este ayuntamiento o esta diputación para tí o para mí. Yo miro al futuro desde el punto de vista del programa», advierte el presidente del EBB.
EL PAÍS, 6/6/2011