Hoy, Alderdi Eguna

El de 2002 (con Juan Josué) fue el Alderdi del ‘Goodbye, Spain’. El de hoy, el de ‘Hola, mi amor, yo soy tu lobo’. Tiene razón López al decir que el PNV ha vuelto al mandamiento estatutario al negociar el apoyo a los Presupuestos contra transferencias estatutarias, pero esto no es muy relevante: para el partido-guía no es contradictorio exigir la completitud del Estatuto y su desbordamiento.

La foto es del Alderdi Eguna del 29 de septiembre de 2002. Se celebró en las campas de Altube y la organización cifró los asistentes en 100.000. Igual que todos los años, por otra parte. Los 100.000 hijos de San Koldo, podríamos decir. Aquella edición fue muy especial, tanto como la de hoy. El viernes, 27, el lehendakari Ibarretxe (Juan Josué) había señalado la Tierra Prometida a los suyos, tomando el relevo al viejo Moisés Arzalluz. Su discurso en aquel pleno fue el arranque del Plan Ibarretxe, que dio pie a gran cantidad de frases hechas: dame plan y llámame tonto, plan mollete sin sentir se mete, and so on.

Aquel fue el Alderdi del ‘Goodbye, Spain’. Éste, que tendrá lugar en las campas de Foronda, el de ‘Hola, mi amor, yo soy tu lobo’. Tiene razón el lehendakari López al decir que el PNV ha vuelto a mandamiento estatutario al negociar el apoyo a los Presupuestos de Zapatero contra transferencias estatutarias, pero esto no es muy relevante para unos especialistas en soplar y sorber al mismo tiempo. Este blogmaster creyó que Arzalluz marcaba un punto de no retorno en 1978, al decir en el discurso del Arriaga:

«Hemos identificado vasco con nacionalista, y ésta es una actitud injusta, antidemocrática y agresiva».

Para qué les voy a decir más. El partido-guía no está sometido al principio de la contradicción, o sea que no es en ellos contradictorio exigir la completitud del Estatuto y su desbordamiento. Es una cuestión gradual: para que se desborde el vaso, primero tienen que llenarlo. Y en ello están. Lo que parece raro es que los dirigentes del PSE se sorprendan, cuando la política de su presidente del Gobierno está libre del principio de contradicción al igual que el PNV.

Acudián 100.000, ya lo verán. Y todos escucharán la verdad, revelada por boca de sus máximos burukides. Es verdad que ésta es la segunda ocasión en que no tienen lehendakari en el mitin, pero no importa, porque desde fuera de Ajuria Enea conseguimos transferencias y más pasta que López, El Intruso. Es verdad que tampoco participa el viejo de la Montaña, pero el pueblo jeltzale tiene a cambio el verbo vigoroso y encendido del joven Iñigo Urkullu para satisfaces su aspiración de ‘light my fire’ (sua, mesedez).

Como prueba, verán que los 100.000 asistentes de este año se saciarán con las 19.000 raciones de comida que se llevarán, según anunció el jueves la secretaria del EBB, Belén Greaves. ¿Milagro? Las raciones vascas son muy copiosas, y debe tenerse en cuenta el precedente. En el sermón de la Montaña, la Organización se apañó con cinco panes y dos peces para dar de comer a las cinco mil personas que asistieron a aquel Alderdi txikia. Eso, respecto a la cantidad. De la calidad ni hablemos. Pueblo elegido por pueblo elegido, los judíos nunca han tenido nuestra tradición culinaria, y, tal como se ve en los textos sagrados, movilizaban menos gente.


Nota aclaratoria para españoles: El Alderdi Eguna es una fiesta creada en 1977, cuando el PNV comprobó que se les había llenado de españoles el primer Alberdi Eguna legal, celebrado el domingo de Pascua para celebrar el glorioso día en que Sabino supo de labios de su hermano Luis que él no era español, mientras paseaban por el jardincillo de su casa, que hoy es la sede central del PNV y se llama, justamente, Sabin Etxea. Había que instituir otra fiesta en la que pudiésemos estar ‘gu ta gutarrak’ y así llegamos, primero a las campas Altube y luego a las de Foronda el último domingo de septiembre.

Santiago González en su blog, 26/9/2010