ABC 16/07/15
· Cree que el Estado «tiene la obligación» de defender la democracia
Al cumplir un año de vida, la asociación Libres e Iguales denuncia que Cataluña se ha convertido en «un limbo legal y moral» en el que no funciona la democracia. Las elecciones autonómicas del 27 de septiembre «están planteadas como un plebiscito que no cabe» en la ley española, sostiene su portavoz, la diputada del Partido Popular Cayetana Álvarez de Toledo, y el objetivo declarado del presidente de la Generalitat, Artur Mas, «es romper en seis meses el Estado democrático español». El ordenamiento jurídico, en definitiva, no se aplica en Cataluña, opina Álvarez de Toledo.
Secesionismo unido La lista soberanista para los comicios es «un intento por enmascarar la realidad y erradicar la pluralidad»
La situación no ha variado mucho desde su aparición. Hoy hace un año nació Libres e Iguales, una plataforma en defensa de la Nación española y el Estado de Derecho. A la vuelta de aquel verano tenía lugar la consulta soberanista impulsada por Artur Mas. Un desafío al Estado en toda regla.
La lectura del manifiesto inaugural corrió a cargo de Álvarez de Toledo, quien aseguró aquel día que el órdago secesionista no recibía la respuesta merecida. En su opinión, faltaba un discurso que desarmara el fondo «reaccionario» del nacionalismo y las consecuencias de su proyecto sobre la libertad de la gente. Voces dormidas.
Un año después, para el inicio de este otoño están convocadas las elecciones autonómicas de Cataluña, el 27 de septiembre, vendidas por el nacionalismo como un plebiscito sobre la independencia. «El proceso delirante de secesión continúa», critica la portavoz, quien cree que «no estamos mejor que el año pasado». La aparente calma, a pesar de las tensiones dentro del propio catalanismo, no es real.
La labor de Libres e Iguales se mantiene, por ello, vigente. Según su representante, «la concienciación de la sociedad española sigue pendiente. Debemos pasar de ser una democracia defensiva a una democracia militante. Están en juego los derechos de todos los españoles». Álvarez de Toledo tiene claro que la mejor fórmula para desactivar al nacionalismo es haciéndole frente. De forma política, intelectual, pedagógica y, por supuesto, jurídica. «El Estado de Derecho tiene la obligación de que la democracia rija en todos los territorios», concluye.
La implicación del Estado
Según Libres e Iguales, la convocatoria de las elecciones autonómicas del 27-S «demuestra que la táctica del apaciguamiento no ha servido para lograr la vuelta a la razón política del nacionalismo catalán». Todo lo contrario. Dichos comicios se van a celebrar en un clima «de corrupción institucional» en la autonomía, mientras el presidente de la Generalitat está siendo investigado por un delito de desobediencia al Tribunal Constitucional, el garante de la «Carta Magna».
La creación de una lista unitaria del soberanismo catalán es, expresa Álvarez de Toledo, un intento de «enmascarar la realidad y erradicar el pluralismo» que existe en Cataluña.
La asociación considera que, «frente a la ruptura de los lazos comunes», es fundamental la implicación del Estado para defender la democracia. Esta actitud es la que ha defendido Libres e Iguales en sus actos desde su nacimiento. Como en el comunicado hecho público al día siguiente de la consulta soberanista o al presentar el documental «Gente que vive fuera».