Basagoiti insiste en «una mesa a tres» con PNV y PSE para definir la gobernabilidad de Euskadi

El dirigente popular defiende «un gran acuerdo democrático para que este país no se pare» y evitar que Bildu lidere las instituciones.

Antonio Basagoiti no da por perdida la posibilidad de tejer «un gran acuerdo democrático» en Euskadi capaz de desbancar a Bildu del poder, sin que sea visto como «un frente». El presidente del PP vasco dio ayer un paso más en su apuesta por organizar una alianza a tres bandas con el nacionalismo moderado y los socialistas vascos que impida gobernar a la coalición soberanista en las instituciones donde es la fuerza más votada, pero sin mayoría absoluta. Basagoiti hizo valer la posición de su partido en el tablero político al plantear directamente a PNV y PSE la creación de «una mesa a tres» para definir en ella la gobernabilidad del País Vasco. «No caben las excusas, ese acuerdo es posible», dijo en un llamamiento a la formación de Iñigo Urkullu.
En su primera rueda de prensa tras la noche electoral, el líder de los populares vascos mantuvo el tono constructivo en sus emplazamientos al PNV, a pesar de sus profundas y anunciadas diferencias sobre el concurso de Bildu al frente de ayuntamientos y de la Diputación de Guipúzcoa. No hay declaraciones altisonantes. Tampoco descalificaciones en su discurso contra los jeltzales. Y eso es señal de que la línea de entendimiento con el partido de Urkullu sigue abierta, aunque hoy por hoy estén lejos de compartir el diagnóstico. Urkullu no quiere «construir muros» contra la alianza de la izquierda abertzale, EA y Alternatiba. Ni se plantea convertirse en «el comodín de nadie, y menos del PSE». En definitiva, no está por la labor de montar «un chachachá a tres».
Basagoiti le emplazó ayer a realizar un ejercicio de «responsabilidad y valentía políticas para que este país no se pare». Le dijo que no se trata de «si le gusta más el PP o el PSE» que Bildu. «Se trata de que la economía vasca no baile con la más fea», indicó siguiendo el símil. Reconoció que para Urkullu «no es fácil» aceptar ese gran acuerdo, pero subrayó que tampoco «es fácil para los que padecen el acoso de los violentos y para los emprendedores ser gobernados por Batasuna», a quienes acusó de «ahuyentar las inversiones» en Euskadi.
Jeltzales y socialistas se citan
Basagoiti dejó claro que «no se resigna» a que Bildu lidere las instituciones, pese a las discrepancias con los jeltzales y ciertas diferencias con el PSE guipuzcoano. El presidente del PP censuró a los socialistas por «jugar a dos barajas» al mostrarse ahora partidarios de llegar a acuerdos parciales con la coalición independentista en materia fiscal y social. «No se puede decir que Bildu es un riesgo para la economía si luego quieren acuerdos económicos con ella. No se puede decir que queremos ser lehendakari para ser exigentes contra ETA si luego llegamos a acuerdos puntuales con quien no ha condenado su pasado de terror», avisó. Aun así, insistió en su idea de una mesa a tres para garantizar la «estabilidad institucional, el progreso económico y la convivencia social».
Este será uno de los asuntos que aborden las delegaciones del PP y del PNV que hoy se citan en el Parlamento de Vitoria, en una reunión entre sus presidentes territoriales convocada a las diez y media de la mañana. Media hora después, los jeltzales se entrevistarán con una comitiva del PSE, en su primer cara a cara oficial para intentar despejar el panorama político en ayuntamientos y Juntas Generales.
EL CORREO,  1/6/2011