El «nuevo tiempo político» de Bilbao

EL MUNDO 21/08/13

La ‘txupinera’ Artola con la casaca roja del traje oficial.
La ‘txupinera’ Artola con la casaca roja del traje oficial.

· La ‘txupinera’ Artola desobedece la prohibición judicial y viste el traje oficial.

Desde luego, las resoluciones judiciales le afectan más bien poco. De nuevo, la izquierda abertzale hace suyas las calles y esquiva, obvia o, simplemente, desprecia aquellas decisiones de los jueces que tratan de frenar sus ansias de expansión para defender la dignidad de las víctimas. Fue a instancia de Dignidad y Justicia y por el rigor del Delegado del Gobierno en el País Vasco que la Justicia tomó la decisión de poner fin al nombramiento de Miren Jone Artola como txupinera de las fiestas de Bilbao, aunque haya servido de poco y la proetarra esté teniendo un gran protagonismo.

El juez atendió el criterio de Carlos Urquijo, que, a su vez, vehiculó la petición de la asociación de Daniel Portero: que Artola encendiera el cohete inicial de las fiestas de Bilbao era un ataque a la dignidad de los que han perdido a los suyos a manos de los asesinos de ETA.

Pero da igual. Miren Artola, destacada representante de la izquierda abertzale, que compartió listas ilegalizadas con el etarra Josu Ternera, campa a sus anchas y sigue actuando en las fiestas como si la txupinera oficial fuera. Y los organizadores de la Semana Grande de Bilbao, con ella, arropándola, como si no hubiera decisión judicial alguna. Ya durante el txupin, Artola compartió con las autoridades el balcón del Teatro Arriaga en el inicio de las fiestas.

El sábado no llevaba el traje oficial de txupinera, pero estuvo en primera fila del evento.

Ayer, sin embargo, ya con la casaca roja del traje oficial de txupinera y pese a la prohibición judicial, acudió junto a la pregonera oficial de las fiestas (también con su indumentaria oficial) a participar en el tradicional concurso de tortilla de patatas (más conocida como tortilla española). Y allí estuvo, departiendo con unos, sonriendo a todos. Un presencia nada inocente sabiendo, como sabe la izquierda abertzale, que tiene una nueva oportunidad de hacerse con el control de las calles. Primero, en fiestas. Luego, el resto del año.

Artola fue descartada por la Justicia por sus estrechos vínculos con todo tipo de asociaciones legalizadas e ilegalizadas vinculadas a ETA. Pero, además, forma parte del comité directivo de una comparsa, Txori Barrote, que ha tenido serios problemas con la Justicia por la continúa exhibición de carteles con fotografías de presos y asesinos etarras. En el pasado, fue denunciada por colocar estos carteles durante las fiestas al considerar las víctimas de ETA que se trataba de una apología del terrorismo. Y durante dos años, el Ayuntamiento de Bilbao suspendió las actividades tanto de esta comparsa como de otra de las más polémicas de la capital vizcaína por su cercanía también a ETA, Kaskagorri. Sus episodios judiciales aún están pendientes de resolverse.

Pero la impunidad que notan los proetarras les lleva a volver a colocar carteles con rostros tachados de etarras en los que figuran sus apodos. Entre los rostros que aparecen en la txozna de Txori Barrote, sí, la txozna de Artola, los de Harriet Iragi e Igor Solana. Cierto que no salen sus identidades. Cierto que no aparece el rostro completo. Pero aparecen sus motes, sus nombres de guerra. Y por ese motivo, Daniel Portero, presidente de Dignidad y Justicia, ha decidido, una vez más, acudir a la Audiencia Nacional. Ha presentado un escrito al juez Eloy Velasco, que está de guardia, para que ordene la retirada de estos carteles. Harriet e Igor asesinaron a su padre, Luis Portero.

Cuando Urquijo acudió al juez, fueron muchas las voces que se levantaron, desde el PNV y PSE, calificando de inoportuna su actuación porque ya estamos «ante un nuevo tiempo político en el País Vasco». Parece que en ese escenario nuevo hay aún muchas imágenes viejas.

EL MUNDO 21/08/13