EL MUNDO – 29/01/16
· Esquerra insiste en que la independencia se declarará en 18 meses.
Junts pel Sí, la coalición entre Convergència y Esquerra que gobierna en Cataluña, anunció ayer que en el plazo de un mes se empezarán a tramitar en el Parlament las leyes de desconexión con el resto de España recogidas en la resolución del pasado 9 de noviembre que pactaron con la CUP. Ese texto, que explicita también la desobediencia a las instituciones del Estado, fue anulado por el Tribunal Constitucional (TC) semanas después de su aprobación.
Las leyes de Transitoriedad Jurídica, de Estructuras de Estado (Hacienda y Seguridad Social propias) y del Proceso Constituyente empezarán a tramitarse en comisión en las próximas semanas, pero lo más probable es que no se aprueben hasta el final de la legislatura, previsto para dentro de 18 meses. Es el mecanismo de defensa contra impugnaciones que ha ideado el Govern, que parece dispuesto a consagrar la desobediencia pese a que la resolución pactada con la CUP creó en su día un gran malestar en sectores de Convergència.
La portavoz parlamentaria de Junts pel Sí, Marta Rovira, explicó que esas leyes se aprobarán en 18 meses junto a la declaración de independencia prevista en el plan de su formación. Según esta dirigente de ERC, cabe la posibilidad de que la Ley de Transitoriedad Jurídica (pensada para evitar el desgobierno en el cambio de la legalidad española a una específica catalana) pueda contener en sus primeros artículos esa declaración de independencia, aunque no lo dio por seguro. También es muy probable que el texto incluya una «Constitución catalana provisional muy básica», que tendría vigencia sólo hasta que fuera aprobada la Constitución «definitiva» en un referéndum previsto para después de unas «elecciones constituyentes».
Rovira intentó también ayer matizar las discrepancias entre Convergència y Esquerra en cuanto al calendario de la independencia. El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, descartó una «declaración unilateral», y otros dirigentes convergentes, como la consellera Neus Munté, rebajaron la proclamación a una «declaración de intenciones». La secretaria general de ERC dijo que su discurso es «compatible» con el de sus socios, pero insistió en que la independencia de Cataluña llegará «antes» de las elecciones constituyentes previstas para dentro de 18 meses, aunque la «proclamación definitiva» de un eventual Estado catalán no tenga lugar hasta después de esos comicios.
Ayer terció en el debate el líder del PSC, Miquel Iceta. Tras reunirse con Puigdemont, aseguró que el president «no tiene perfectamente determinados los plazos para poner en marcha» el proceso independentista. Sobre las desavenencias entre Convergència y ERC, bromeó: «Hemos pasado de una declaración unilateral de independencia a una declaración universal de intenciones, de DUI a DUI».
EL MUNDO – 29/01/16