Empieza el examen a un acertado Rivera

VICTORIA PREGO, EL MUNDO – 10/06/15

· Ciudadanos se ha metido ya en harina y ha dado su apoyo a la investidura de Susana Díaz. Lo compensará seguramente permitiendo que Cifuentes sea presidenta de la Comunidad de Madrid. Una de cal y otra de arena.

Pero las dos decisiones comportan riesgos. Desde luego esta primera, porque el Gobierno de Susana Díaz está contaminado por casos de corrupción. Sólo recordar que acaban de ser detenidos varios ex altos cargos de la Junta, delegados provinciales de la Consejería de Empleo, jefes de servicio y jefes de departamento desde donde en cinco años se concedió la friolera de 3.000 millones a cursos de formación.

Esto es de ahora mismo pero no hay duda de que seguirá el goteo de detenciones. Además, la señora Díaz tiene ante sí la amenaza del caso de la concesión de la mina de Aznalcóllar, que ella ordenó y vendió con pasión, pero que está siendo ahora investigada en los juzgados.

Son dos asuntos que se suman a los casos de Griñán y Chaves, que están pendientes de la resolución del Supremo, y frente a los que Ciudadanos se ha conformado al final con la promesa de los socialistas de que les pedirán el acta si son definitivamente imputados por el Alto Tribunal.

Es verdad que si no hubieran decidido aflojar en sus exigencias no habrían podido cumplir el papel que se espera de ellos que es, ni más ni menos, que ayuden a gobernar a quien necesita de su apoyo, pero que al mismo tiempo fuercen a los partidos con los que pacten a cumplir un estricto código ético que aleje en lo posible los siniestros tiempos de desvergüenza y robo que hemos vivido.

Lo que ocurre es que los casos antes enumerados van a obligar a los diputados de Ciudadanos a tomar enseguida posición en el Parlamento andaluz pidiendo responsabilidades a la presidenta Díaz. De modo que, una vez la hayan investido, tendrán que pasar acto seguido a la oposición activa y a reclamar una y otra vez que se cumpla en todos sus términos la lista contra la corrupción que han presentado ante todos sus interlocutores políticos.

Pero a Ciudadanos hay que agradecerle que haya desbloqueado el atasco político en que se había quedado Susana Díaz por su falta de cálculo y por su sobra de seguridad. Ahora todos los ojos se posarán en la gente de Rivera, que hoy empieza a someterse a un examen que va a durar meses, hasta que se celebren las generales.

De momento, aciertan ayudando a Susana Díaz y posibilitando el acceso al gobierno de Cristina Cifuentes en Madrid, donde se tendrán que enfrentar probablemente a pruebas similares a las andaluzas porque también en esta Comunidad la corrupción está acechando la lista que le hicieron a la candidata regional y que ella tuvo que aceptar. Así que el examen a Rivera será doble y muy estricto. Y se juega mucho en él.

VICTORIA PREGO, EL MUNDO – 10/06/15