La Abogacía del Estado estudia ya la resolución del referéndum

ABC – 08/10/16

· El Gobierno advierte a los independentistas de que están abocados «a la melancolía».

La historia se repite. A cada paso de los independentistas, el Gobierno de la Nación actúa para frenarlo en seco en los tribunales. En esta ocasión no ha sido diferente y la Abogacía del Estado ya está estudiando las resoluciones aprobadas el pasado jueves en el Parlamento autonómico catalán, dirigidas a la convocatoria de un referéndum de independencia antes de septiembre de 2017. Cuando la Abogacía analice la mejor manera de proceder ante este hecho, el Gobierno actuará de forma inmediata.

Sin ningún aspaviento y con mucha tranquilidad, la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, advirtió a los independentistas de que si se empeñan «en repetir los errores que cometió el señor Artur Mas y copiar la hoja de ruta que siguió, el Estado de Derecho seguirá actuando como corresponde». Recordó que aquella hoja de ruta de Mas, que convocó un referéndum el 9 de noviembre que acabó anulado por el Constitucional, ha sido «deslegitimada» reiteradamente por los tribunales, por lo que vaticinó que el resultado «será el mismo» ante la misma actuación, «repetitiva hasta la saciedad».

«El proceso es el mismo, y si vuelven a convocar un referéndum ilegal, la respuesta volverá a ser la misma», explicó la número dos del Ejecutivo, quien subrayó que «el Estado de Derecho se mantendrá firme en la defensa de los derechos de todos los españoles».

Sáenz de Santamaría lamentó que los independentistas sigan «repitiendo la misma letanía del referéndum cuando en Cataluña hay muchos problemas reales que no se están gestionando y cuando el Estado de Derecho ha dejado muy claro lo que se puede y no se puede». Todo esto, auguró, solo tendrá un resultado: «Sencillamente abocará a la melancolía a los independentistas», y nunca al Estado de Derecho, «porque se mantendrá firme en lo que se tiene que defender».

La vicepresidenta en funciones aprovechó las decisiones del jueves del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo para recordar a los dirigentes independentistas que «las resoluciones de los tribunales hay que acatarlas», y que la ley debe ser igual para todos los ciudadanos.

El anuncio de Saénz de Santamaría de que la Abogacía del Estado ya estudia las resoluciones del Parlamento catalán en favor de un referéndum tuvo una rápida –y, de nuevo, desafiante– respuesta por parte de la Generalitat. La consejera de Presidencia y portavoz del ejecutivo que lidera Carles Puigdemont, Neus Munté, afirmó que el ejecutivo catalán no aceptará «amenazas» del Gobierno. Además, añadió que no le dan «miedo ninguno las artimañanas ni estrategias» del Estado para «poner límites a la soberanía del Parlament de Cataluña».

«No aceptamos amenazas. Lo que respetamos son los mandatos democráticos del Parlament de Cataluña», sentenció Munté.

Podemos y la unilateralidad

Por otra parte, el líder de En Comú Podem –la confluencia catalana de Podemos, ICV y el partido de Ada Colau en el Congreso–, Xavier Domènech, manifestó ayer su disposición a «escuchar» la propuesta de un referéndum unilateral de independencia acordada en el Parlament con los votos de de Junts pel Sí y la CUP siempre que sea «efectivo», «vinculante» y tenga reconocimiento internacional. Y no suponga una repetición del 9-N. De echo, Catalunya Sí que es Pot presentó anteayer en el debate de política general de Cataluña una propuesta de referéndum en este sentido. JpS votó a favor y la CUP –que ayer estrenó una web con una cuenta atrás para el referéndum de septiembre– se abstuvo.

En rueda de prensa, Domènech insistió en que el referéndum debe ser «vinculante», «útil» y «efectivo», lo que implica que tenga una reconocimiento de la comunidad internacional e interpele a una mayoría social de catalanes. De lo contrario, señaló, no sería un «espacio de decisión» de los ciudadanos sino de «movilización» como el proceso participativo del 9-N que ha llevado a Artur Mas ante la justicia.

«El referéndum debería ser pactado con el Estado. Ahora bien, si alguien nos explica que quiere hacer otra cosa, y que no sea un 9-N, nosotros no lo vemos, pero si es efectivo, vinculante y tiene reconocimiento internacional, estamos dispuestos a escuchar», argumentó el líder de En Comú Podem en la Cámara Baja.

Asimismo, Domènech avanzó que votarán en el Congreso en contra del suplicatorio al exconsejero diputado de Convergència Francesc Homs para que sea juzgado por el Tribunal Supremo por el 9-N.

ABC – 08/10/16