IGNACIO MARCO-GARDOQUI-EL CORREO
- Veremos cuándo y cómo aflora la inflación embalsada en toda la cadena de producción
El INE confirmó ayer su dato de la inflación registrada en marzo. Es la misma que anunció a finales de mes. Un 9,8%. La mala noticia es que no la rebaja y sigue rozando los dos dígitos. La buena es que no la sube y sigue por debajo de ellos. Ya le he comentado que esto de los precios es lo peor de todo lo malo que nos sucede. Actúa como un impuesto de lo más retrógrado ya que su impacto es mayor cuanto la renta percibida es menor, dado que el consumo ocupa más espacio cuando la renta desciende. Esta erosión de las rentas queda agravada por la insistencia del Gobierno en no deflactar las tarifas del IRPF, como también resiste la tentación de reducir los impuestos que se aplican de manera proporcional -el IVA por ejemplo- a aquellos productos que han subido de precio de forma exponencial. Total, que mientras la ministra Montero se forra, usted se acogota. No piense en sus ahorros, les sucede lo mismo.
Luego vienen los efectos de segunda ola. La inflación presiona al alza a los salarios, lo que supone una reducción de los márgenes operativos que las empresas tratarán de recuperar subiendo sus precios y retroalimentando la inflación. Y quedan, como siempre, las subidas de los salarios públicos y de las pensiones, que aumentarán los gastos públicos y castigarán los presupuestos, ya de por sí muy deteriorados por el aumento de los gastos sociales que, primero la pandemia y después la guerra, nos han impuesto. La comprometida actualización de las pensiones subirá los gastos, lo que equivale a muchos miles de millones de euros. Bueno, no pasa nada, ya sabe que esto del déficit público creciente es muy llevadero y no plantea problemas. Únicamente le informo de que el euríbor se ha puesto en positivo, algo que no sucedía desde hace años, y anuncia un endurecimiento de la política monetaria, a lo que se resiste panza arriba el Banco Central Europeo. ¿Cuánto le durarán las fuerzas? Gran pregunta…
Los que aseguraron que esto era algo temporal, cuando la inflación empezó su escalada a las nubes, dicen ahora que ya hemos llegado a la cumbre y que las cosas empezarán a mejorar en cuanto hagan efecto las medidas de contención -gas, electricidad y gasolina- adoptadas por el Gobierno. Es seguro que se notarán, no lo es que vayan a ser capaces de arreglar la situación. Además de que sigo pensando que hay mucha inflación embalsada a lo largo de la cadena de producción que no ha aflorado todavía. Veremos. Próxima cita en dos semanas.