EL CORREO 03/04/13
· El lehendakari ha retrasado también la inauguración de la nueva sede de Naturgas, prevista para mañana.
La decisión del lehendakari, Iñigo Urkullu, y del diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, de no asistir hoy a la inauguración de las nuevas instalaciones de la refinería Petronor en Muskiz –la mayor inversión industrial en la historia de Euskadi, con un desembolso total que se acerca a los 1.000 millones de euros–, ha desatado una marejada política ante la falta de explicaciones oficiales por parte de los gobiernos vasco y foral. El PSE y el PP exigieron ayer que los líderes de ambas instituciones aclaren los «problemas de agenda» que les han impedido estar presentes en el acto, que será presidido por el Príncipe de Asturias. Los dos partidos han registrado sendas preguntas al respecto en el Parlamento de Vitoria y las Juntas Generales de Bizkaia ante unas ausencias que juzgan «incomprensibles».
Además, ayer se conoció que el lehendakari ha retrasado también la puesta de largo de la nueva sede central de Naturgas en Bilbao, prevista en principio para mañana. La empresa energética y Ajuria Enea habían pactado hace tiempo la fecha del 4 de abril como día de la inauguración del edificio –la antigua sede del Centro Farmacéutico, en la calle General Concha–, pero el 21 de marzo la Presidencia del Gobierno vasco solicitó un aplazamiento de la cita. La compañía aceptó la petición y las invitaciones para el acto, que estaban a punto de ser enviadas, quedaron en un cajón. A la apertura oficial estaba prevista la asistencia de Antonio Mexia, presidente de la multinacional portuguesa EDP, propietaria de la mayoría de las acciones de Naturgas.
«Compromisos fuera»
El Gobierno vasco y la Diputación de Bizkaia mantienen un mutismo absoluto sobre la no presencia de Urkullu y Bilbao en Petronor. Portavoces del Ejecutivo se limitan a señalar que el lehendakari no podrá asistir por «tener compromisos fuera de Euskadi». Desde la institución foral vizcaína señalan que «el diputado general no estará aquí». Cuestionadas las fuentes oficiales de ambas instituciones sobre la hipótesis de que ambos dirigentes se encuentren de vacaciones, la respuesta es idéntica: «No hay nada más que comentar». La oposición sospecha que los dos responsables del PNV no acuden al acto porque se encuentran de viaje con sus familias.
La presidenta del Bizkai buru batzar, Itxaso Atutxa, descartó ayer que «haya razones ocultas» en la decisión de Urkullu y Bilbao de no asistir a la puesta de largo de la planta de coque de la refinería, e insistió en que se ha tratado tan solo de «problemas de agendas». En tono conciliador, destacó la trascendencia de la inversión realizada por el grupo Repsol. «Es importante –dijo– no solo por lo que aporta a la Hacienda vizcaína en diferentes impuestos, sino también porque es una de las mayores proveedoras de trabajo, algo que hoy en día escasea, tanto directa como indirectamente, con más de 5.000 trabajadores indirectos».
El portavoz parlamentario del PSE, José Antonio Pastor, calificó de «muy sorprendente y absolutamente incomprensible» que el lehendakari y el diputado general de Bizkaia no asistan a la inauguración de la inversión industrial más importante realizada en Euskadi. «Es un desaire a una empresa que es uno de los motores económicos de este país», subrayó. El dirigente socialista hizo hincapié en que ninguno de los dos responsables del PNV «haya tenido problemas de agenda para estar presentes en el Aberri Eguna» y sí para acudir al acto de hoy. «No se entiende mucho que, por una difusa justificación de compromisos previos, no asistan a la inauguración en una empresa que supone casi el 37% de los ingresos fiscales de la Diputación de Bizkaia». Esa actitud –añadió– no se corresponde con «los continuos llamamientos a la responsabilidad política» ni con las apuestas por la inversión productiva.
El presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, acusó a Urkullu de «no estar a la altura» de sus responsabilidades como lehendakari y de hacer dejación de ellas. «En su opinión, no hay excusas «ni de vacaciones, ni de anteriores presidencias del PNV –en referencia a Josu Jon Imaz, exlíder del partido y actual presidente de Petronor–, ni mucho menos por la presencia del Príncipe, que siempre apoya al País Vasco, independientemente de quién gobierne o sea lehendakari». «Las empresas que invierten en el país necesitan verse apoyadas por el Gobierno», enfatizó.
EL CORREO 03/04/13