Rebelión en las diputaciones socialistas

EL MUNDO – 26/02/16

· Media docena de líderes provinciales claman contra la supresión de esta institución.

El pacto entre PSOE y C’s continúa levantando escamas en otros partidos, pero también en los propios firmantes del acuerdo, al menos en la parte socialista. En concreto, uno de los puntos –la supresión de las diputaciones que exigía Ciudadanos– ha provocado un aluvión de críticas de quienes se encuentran al frente de las mismas dentro de las filas del PSOE.

Las principales procedieron de Andalucía, aunque no fueron las únicas. El vicepresidente de la Diputación de Huelva, José Luis Ramos, consideró por ejemplo que una posible supresión supondría un «ataque directo a los pequeños municipios». Además, manifestó que el partido «tiene vocación municipalista y una de sus señas de identidad es la defensa del municipalismo, trabajando desde lo local a lo general». Por ello, anunció que los socialistas onubenses presentarán una moción en apoyo a la labor de los entes provinciales.

Para Fernando Rodríguez Villalobos, al frente de la Diputación sevillana, hay que «dar visibilidad al imprescindible trabajo» que llevan a cabo estas instituciones, mientras que Irene García, a la cabeza de esta institución en Cádiz, pidió a la Ejecutiva Federal del PSOE que «reconsidere» la eliminación y «rectifique» este punto concreto del acuerdo con Ciudadanos.

Más allá, el presidente de la Diputación Provincial de Jaén, Francisco Reyes, aseguró directamente que votará en contra del acuerdo en la consulta a la militancia que se celebrará este fin de semana.

Como colofón a todos ellos habló la líder del PSOE andaluz, Susana Díaz, que también defendió el papel de las instituciones provinciales para «vertebrar y cohesionar el territorio», aunque admitió que «habrá cosas que hay que cambiar», ya que «es lógico que haya que modernizar las instituciones». «Creo que cualquiera de estas reformas tendrá que contar después con el consenso y el debate del resto de fuerzas políticas», añadió la presidenta andaluza.

Pese a que la mayor parte de diputaciones socialistas se encuentra en Andalucía, en otros puntos de la Península también se sumaron a la rebelión otros dirigentes del partido. Es el caso de los presidentes de las diputaciones de Zaragoza y Huesca, que anunciaron que también votarán no a la pregunta formulada desde Ferraz a la militancia por este asunto. Los dos rechazan rotundamente la propuesta de suprimir las diputaciones, pues las consideran imprescindibles en un territorio como el aragonés, con muchos pequeños municipios, informa Javier Ortega.

Por último, la presidenta de la Diputación de Cáceres, Rosario Cordero, también anunció que votará en contra del acuerdo firmado por su partido con Ciudadanos, al incluir la supresión de las diputaciones. Cordero cree que la decisión de anular estos organismos supone «un desprecio al mundo rural» y que la medida va encaminada a «destrozarlo». Para la presidenta de la Diputación cacereña, la propuesta está realizada «desde el desconocimiento» y lamenta que ni siquiera se les haya consultado a los presidentes de las diputaciones antes de tomar una iniciativa «tan importante». De hecho, la socialista recordó que la provincia de Cáceres cuenta con un 70% de municipios que tienen menos de 1.000 habitantes, informa David Vigario.

A nivel autonómico, el primero en criticar el acuerdo con Ciudadanos en este punto fue el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien calificó estas instituciones como «costura constitucional» y recordó que se mantuvieron en la Carta Magna en 1978 como «contrapeso» al poder de las comunidades autónomas. En este sentido, apuntó que probablemente una de las más satisfechas con una desaparición de las diputaciones sería la Generalitat catalana.

A la opinión de Page le siguieron ayer las de otros como el presidente de Aragón, Javier Lambán, que se manifestó a favor de la supervivencia de estas instituciones, porque «prestan un gran servicio a municipios y ayuntamientos y al medio rural».

EL MUNDO – 26/02/16