EL MUNDO – 19/12/15
· La Fiscalía les considera autores del asesinato del magistrado José María Lidón, cometido por ETA en 2001.
El trabajo de revisión de las causas abiertas por atentados de ETA que desarrolla la Fiscalía de la Audiencia Nacional continúa. Esta semana, con la presentación de su escrito de conclusiones provisionales, ha culminado el procedimiento que logró reabrir por el asesinato del magistrado José María Lidón, cometido en Getxo (Vizcaya) el 7 de noviembre de 2001.
La Fiscalía que dirige Javier Zaragoza solicita 30 años de prisión para el ex dirigente etarra Garikoitz Aspiazu Rubina, Txeroki, y para su compañero del comando Olaia, Asier Arzalluz Goñi, Sendoa, como autores de un delito de atentado de carácter terrorista.
Además, pide que ambos sean inhabilitados durante 20 años una vez sean excarcelados y que durante los primeros 10 tengan prohibido acercarse «al domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro que frecuentaren» la viuda de Lidón, María Luisa Galarraga, o su hijo, Iñigo Lidón Galarraga. El Ministerio Público pide que sean indemnizados con 500.000 euros.
Entre septiembre de 2001 y abril del año siguiente, Aspiazu Rubina y Arzalluz Goñi, junto a Idoia Mendizabal Múgica –cuya participación en el asesinato de Lidón no ha quedado acreditada, por lo que no es acusada–, eran liberados de ETA entre cuyos objetivos se encontraba atentar contra el aparato de justicia español.
Txeroki y Sendoa conocían los hábitos y horarios del magistrado de la Audiencia Provincial de Vizcaya José María Lidón, gracias a las informaciones que les había facilitado el colaborador del comando Orkatz Gallastegui Sodupe, ya condenado por estos hechos.
Momentos antes de las 7.20 horas del 7 de noviembre de 2001, los dos etarras esperaron a Lidón a las puertas del aparcamiento donde estacionaba su vehículo, en la calle Mariandresena de Getxo. Primero salió el coche del hijo del magistrado y se cruzó con dos hombres en la entrada. A continuación salió el del juez en el que, como todos los días, viajaba también su mujer. Los etarras se aproximaron al asiento del conductor, que estaba totalmente desprevenido, y le descerrajaron siete tiros que le causaron la muerte.
Tanto la esposa como el hijo de Lidón pudieron ver a los autores del atentado y facilitar su descripción a las Fuerzas de Seguridad. Además, también identificaron a Txeroki en una rueda de reconocimiento que se realizó tras la reapertura de la causa.
ETA reivindicó el atentado el 15 de noviembre de 2001 a través de Gara y Egunkaria, y también lo reflejó en su publicación interna Zuzen.
La fiscal Rosana Lledó explica en su escrito que una de las pistolas utilizadas en el atentado de Lidón fue encontrada entre los restos del vehículo que estalló en el barrio de Basurto de Bilbao el 23 de septiembre de 2002. La explosión se produjo a consecuencia de la manipulación de un artefacto explosivo por los miembros del comando Olaia que sustituyeron a Txeroki y Sendoa. Se trataba de Egoitz Gurrutxaga Gogorza y Hodei Galarraga Irastorza. En el vehículo se encontró otra arma, pero no pudo ser identificada debido al estado en el que se encontraba.
No es este el único procedimiento que aún tiene pendiente Txeroki, que actualmente cumple condena en Francia. El pasado 27 de octubre fue procesado, junto con otros cuatro dirigentes etarras, por un delito de lesa humanidad. El juez le impuso una fianza de cinco millones de euros por otros tantos asesinatos perpetrados por ETA mientras él la dirigía.
EL MUNDO – 19/12/15