¿Por qué ETA expulsó a cinco militantes presos?

Reproducimos aquí la extensa información que el diario mexicano El Universal publicó sobre la expulsión de cinco militantes de ETA durante su encarcelamiento. “…Sin embargo, el caso más sorprendente es el de Jorge Uruñuela, que a los pocos días de su expulsión se conoció que ETA lo separó porque estando en prisión se enamoró de una empleada de la cárcel y dejó a su novia de siempre, también afín al independentismo…”

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Moviliza ETA a presos y hace presión política

El colectivo de presos de ETA emitió un comunicado reciente en el que exige a los apresados, unos 576 en España y 166 en Francia, hacer encierros, renunciar a salir al patio, a la correspondencia y a comer en la celda.

Ante los golpes contra su estructura armada y el cierre a sus espacios políticos, la organización separatista Patria Vasca y Libertad (ETA) abrió un nuevo frente de presión a través de sus presos, a los que exige radicalizar sus protestas.

Fuentes oficiales explicaron que esta semana ETA ordenó a sus militantes que están presos iniciar una protesta contra la política penitenciaria a la que están sujetos en España y Francia.

El gobierno español consideró que esa medida busca asegurar la disciplina de los etarras a favor de la violencia.

Las fuentes precisaron que ‘estas medidas se estudian con una posible conexión con un debate interno’ entre militantes y en especial en la llamada izquierda ‘abertzale’ (independentista, y señalada como rama política de ETA) sobre la necesidad de dejar las armas y privilegiar sólo vías políticas.

‘Pero sobre todo, esto sí se relaciona con la reciente expulsión de varios presos etarras, algunos históricos’ que han expresado su diferencia con la disciplina férrea de la organización, pero sobre todo que reconocen que la lucha armada no logrará los objetivos de ETA.

El colectivo de presos de ETA emitió un comunicado reciente en el que exige a sus presos, unos 576 en España y 166 en Francia, hacer encierros, renunciar a salir al patio a paseos, a la correspondencia, a comer en la celda.

Por muchos años, la dirección etarra ha prohibido a sus presos que participen en los programas de reinserción y en los beneficios de reducción de penas y que se abstengan de laborar en actividades que les dejen remuneración.

Los cuerpos de seguridad del Estado consideraron que la orden de movilización a los presos es una manera de la dirección de ETA de decir que es ella la que controla la actividad interna y que no se hacen debates sin su consentimiento.

Por eso, se relaciona con esta movilización el reciente desmentido que hizo el también preso Arnaldo Otegi, ex portavoz de la ilegalizada Batasuna (partido político que representaba los intereses etarras) de un documento que se apartaba de la lucha armada.

Pese a negarlo, semanas atrás ese documento circuló entre varios representantes de la izquierda ‘abertzale’ y medios vascos le dieron la interpretación de debate interno y alejamiento de las tesis de resistencia armada a favor de la independencia.

En ese contexto, se dio la expulsión el pasado 4 de enero de los presos Iñaki Rekarte, Valentín Lasarte, Esteban Murillo, Jorge Uruñuela y Andoni Muñoz, a los que la dirección de ETA acusó de indisciplina.

De ellos, destacan los casos de Rekarte y Lasarte que en 2009 se desmarcaron de la violencia etarra, en concreto de los últimos atentados mortales, y empezaron a trabajar dentro de sus prisiones y a recibir salario por ello.

Sin embargo, el caso más sorprendente es el de Jorge Uruñuela, que a los pocos días de su expulsión se conoció que ETA lo separó porque estando en prisión se enamoró de una empleada de la cárcel y dejó a su novia de siempre, también afín al independentismo.

Además de las exigencias que siempre ha impuesto a sus presos, ETA impide que éstos hagan amistades con funcionarios de prisiones, a los que considera parte del ‘Estado opresor’ que fomenta la dispersión en las cárceles.

A la par de estas movilizaciones, ETA ha sufrido numerosos golpes, como la detención de seis miembros la pasada semana en España, Francia y Portugal, considerada de gran importancia ya que se cree que impedirá que se establezca en territorio portugués un comando operativo.

Tan sólo en 2009 se reportaron numerosas detenciones entre ellas dos veces la desarticulación del aparato militar, del ‘comando Guipúzcoa’ y la incautación de más de una tonelada de explosivos y 20 escondites de armas, dinero y documentación.

Para el ministro español del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, responsable de la seguridad interna en España, esta es una lucha a largo plazo ‘para la que los Cuerpos de Seguridad están preparados’.

‘Se sabe dónde está ETA y lo que hace, pero también se sabe lo que hacen las Fuerzas de Seguridad del Estado que van a seguir llegando hasta ellos (los etarras) a detenerlos, y así hasta acabar con esto’, manifestó el ministro al dar a conocer los recientes golpes policiales

EL UNIVERSAL (México), 16/1/2010