El PP anima al PSOE a explorar la gran coalición

EL MUNDO – 28/12/15

· Pone como ejemplo de éxito los acuerdos de los grandes partidos en Alemania y Francia.

· El PP está dispuesto a abogar abiertamente por la fórmula de la gran coalición o, en su defecto, por un pacto con el PSOE que permita la gobernabilidad del país.

Así se pone de manifiesto en el último argumentario que Génova ha trasladado a sus cuadros y en el que insiste en la idea de que «los grandes partidos españoles deben seguir los ejemplos de las grandes democracias europeas, dejar de lado sus diferencias y apostar por un Gobierno de certidumbres, moderación y centralidad en beneficio del interés general».

«Los ciudadanos españoles», añade el texto, «no se merecen coaliciones oportunistas con partidos extremistas ni independentistas que pongan en riesgo todo lo que hemos logrado en 37 años de democracia. Si queremos consolidar nuestra condición de gran nación europea, actuemos como tal».

El texto se ha puesto este fin de semana en circulación entre los cargos del PP a fin de que trasladen públicamente esta idea coincidiendo con un momento decisivo para el PSOE: la reunión, hoy, de su Comité Federal para adoptar una postura común en relación con los posibles pactos para formar Gobierno.

Desde Génova se recuerda que las sociedades europeas «han preferido siempre el acuerdo entre sus grandes partidos en momentos de difícil gobernabilidad y frente a inciertos escenarios de encasillamiento ideológico».Este tipo de acuerdos, ya sean para constituir una coalición, bien para dar lugar a otro tipo de fórmulas que permitan la formación de un Gobierno estable, han demostrado ser, según el PP, «sumamente eficaces para dotar de estabilidad y moderación a sus sistemas políticos y hacer frente desde la centralidad a sus grandes desafíos nacionales».

A la hora de justificar y fundamentar este planteamiento, el PP utiliza como ejemplo los casos alemán y francés. Así, cita el primer Gobierno de gran coalición presidido por Merkel entre 2005 y 2009 que, señala el texto, «apuntaló y dio continuidad a la Agenda 2010 del anterior canciller socialdemócrata, Gerhard Schröder». Se formó un Gobierno de unidad que siguió con las reformas estructurales que transformaron la economía alemana.

El PP encuentra en los comicios alemanes de 2013 un nuevo ejemplo, cuando la CDU rechazó pactar con la derecha euroescéptica de Alternativa por Alemania y el SPD hizo lo propio respecto a la izquierda radical de Die Linke. Finalmente, los dos grandes partidos volvieron a acordar un Gobierno de gran coalición.

También se cita el caso francés cuando, tras las regionales de este mismo mes de diciembre en las que la derecha xenófoba ganó en seis de las 13 regiones en liza en la primera vuelta, el Partido Socialista optó por retirar a sus candidatos sin opciones en dos regiones y Manuel Valls –primer ministro socialista– pidió en ellas el voto para los republicanos de Nicolas Sarkozy. Así consiguieron que la formación de Marine Le Pen no obtuviera ningún Gobierno.

Igualmente ponen como ejemplo la «cohabitación» francesa, una fórmula que sin implicar un acuerdo parlamentario al uso siempre ha conducido a pactos de Estado entre el socialismo y el centro derecha, ocupando uno la Presidencia de la República y el otro la Jefatura del Gobierno. Así sucedió en 1986 (Mitterrand-Chirac), 1993 (Mitterrand-Balladur) y 1997 (Chirac-Jospin).

EL MUNDO – 28/12/15